Juan Carlos Rueda, anunció al imposición de medidas cautelares por el caso de presunta estafa contra el Isspol. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
El director del Instituto de Seguridad Social de la Policía Nacional (Isspol), Juan Carlos Rueda, anunció, a través de su cuenta de Twitter, que se resolvió imponer medidas cautelares contra las firmas panameñas IBCorp, HYBF y el Depósito Centralizado de Valores (Decevale) por el caso de presunta estafa contra la entidad.
La información la hizo pública este 13 de febrero del 2021. Este Diario intentó contactar al general en servicio pasivo que dirige ISSPOL, sin respuesta. En su publicación de Twitter asegura que el anuncio lo hace en el nombre de 79 656 familias de policías y que se busca proteger el patrimonio de los afiliados.
El escándalo estalló en septiembre del año pasado cuando se conoció que se habría identificado un perjuicio o estafa por alrededor de USD 532 millones a los fondos del Isspol entre el 2014 y 2017, por dos operaciones en las que se usaron bonos del Estado.
Ambas supuestamente se realizaron a través de IBCorp y HYBF, bajo la representación de Jorge Chérrez. A fines de ese mismo mes este solicitó una audiencia de arbitraje por el caso, que no llegó a concretarse. Sin embargo, en esas mismas fechas negó, a través de un comunicado, que las inversiones sean irrecuperables o que sean una estafa.
Chérrez habría indicado que los bonos se depositaron y colocaron en custodia en la cuenta de Decevale y que dichos activos estaban totalmente libres para ser transferidos. Sin embargo, la entidad, que está intervenida por la Superintendencia de Compañías desde el 18 de septiembre del 2020 por el caso, ha negado que haya recibido dichos fondos y que haya participado en negociaciones de Isspol.
El pasado 3 de febrero del 2021 el general en servicio pasivo Rueda remitió una carta a Chérrez en la que le recuerda el argumento expuesto por Decevale y agrega que según la Superintendencia esta no ha tenido ni tiene autorización para actuar como custodio o subcustodio de títulos de deuda externa ecuatoriana, como los que tenía el Isspol.
“Insistir en la aplicación de este tipo de procedimiento, denota un desmesurado afán de generar una expectativa de solución, que en el fondo no tiene viabilidad jurídica”.
El Isspol ha venido solicitando a Chérrez saber si los títulos que respaldan las inversiones están o no a nombre del instituto y dónde están, sin que hasta ahora haya recibido una respuesta.