Fotografía cedida por la ONU donde aparece su secretario general, António Guterres (i), mientras informa sobre el reciente aumento de las tensiones mundiales en una declaración de urgencia el 6 de enero del 2020, en la sede del organismo en Nueva York (EE.UU.). Foto: EFE
Iraq exigió el lunes 6 de enero del 2020 en una carta a la ONU que el Consejo de Seguridad condene el ataque, realizado en su territorio el viernes 3 de enero por Estados Unidos, que mató al general iraní Qasem Soleimani y a su teniente iraquí, Abu Mehdi Al Muhandis, para que “la ley de la selva” no domine las relaciones internacionales.
Esta operación estadounidense “representa una agresión contra el pueblo y el gobierno de Iraq, una violación flagrante de los términos según los cuales las fuerzas estadounidenses están presentes en Iraq y una escalada peligrosa que podría desencadenar una guerra devastadora en Iraq, la región y el mundo”, dijo el embajador iraquí en la ONU, Mohamed Hussein Bahr Al Ulum, en esta misiva obtenida por la AFP.
Iraq pidió al Consejo “que cumpla con sus responsabilidades de garantizar la rendición de cuentas de quienes han cometido tales violaciones, que no violan solo los derechos humanos sino el derecho internacional, haciendo que la ley de la selva prevalezca y gobierne la comunidad internacional”, dijo el diplomático.
En su carta de tres páginas, el embajador iraquí no llama explícitamente a una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad sobre los últimos acontecimientos.
Iraq no es miembro del Consejo, pero puede solicitar una reunión a través de uno de los 15 países que forman el órgano más alto de las Naciones Unidas, responsable de garantizar la paz mundial.
La misiva de Bagdad sigue el anuncio el domingo del Ministerio de Relaciones Exteriores iraquí de una queja al Consejo de Seguridad de la ONU.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, pidió este lunes a los dirigentes del mundo “moderación máxima y “retomar el diálogo” para “detener la escalada” de tensiones internacionales.
“Vivimos en tiempos peligrosos. Las tensiones geopolíticas están en su nivel más alto del siglo y las turbulencias aumentan”, afirmó Guterres en una declaración solemne en la sede de las Naciones Unidas, en la que deseó que “el año 2020 sea mucho mejor que 2019”.
“Este caldero de tensiones lleva a cada vez más países a tomar decisiones imprevisibles con consecuencias imprevisibles, y un profundo riesgo de errores de cálculo”, dijo sin mencionar explícitamente las tensiones crecientes en Oriente Medio después de la muerte de un alto dirigente militar iraní en un ataque aéreo estadounidense.
“Mi mensaje es simple y claro: detener la escalada, ejercer una moderación máxima, retomar el diálogo y renovar la cooperación internacional”, pidió, a la vez que dijo estar en “ contacto permanente con los dirigentes del mundo”.
“No olvidemos el terrible sufrimiento humano causado por la guerra. Como siempre, la gente corriente paga el precio más alto. Es nuestro deber común evitarla”.
Irán prometió vengar la muerte del general Qasem Soleimani, ocurrida el viernes en un ataque aéreo de Estados Unidos cerca de Bagdad. El presidente estadounidense, Donald Trump, amenazó a Teherán con represalias importantes en caso de ataque, lo que desató temores de un conflicto abierto entre los dos países.
Después de la muerte de Soleimani, Guterres señaló que “el mundo no (puede) permitirse una nueva guerra en el Golfo”.