Redacción Negocios
Una delegación de empresarios iraníes se encuentra en el país desde inicios de esta semana. El objetivo de la misión iraní es dialogar con personal del Ministerio de Energía de Ecuador y representantes de dos empresas ecuatorianas para la construcción de tres centrales hidroeléctricas en el país.
Este acercamiento se da como parte del memorando de entendimiento que firmaron, en marzo pasado, los gobiernos de Ecuador e Irán para el posible financiamiento y edificación de dichos complejos eléctricos.
Una de las compañías con las que los iraníes mantuvieron diálogos es con la Empresa Eléctrica Quito (EEQ), quien está a cargo de los proyectos Quijos y Baeza, ubicados en la provincia de Napo, a 70 kilómetros de Quito, que tienen la capacidad de generar 50 MW cada uno.
Según Fernando Gómez, director de Generación de la EEQ, el tema lo están tratando con la constructora Farab, que fue designada por el Gobierno iraní para la construcción de la obra, en el caso de llegar a un acuerdo entre los dos estados. “Estamos en pleno proceso de negociación por lo que sería aventurado adelantar cifras sobre el monto de la inversión”, afirmó.
Los iraníes también se acercaron a los representantes de la empresa ecuatoriana Energy Dine, perteneciente a Holding Dine. Este grupo está encargado de la construcción de la central hidroeléctrica Río Luis, que tiene como objetivo edificarse en El Oro, en los límites entre los cantones Zaruma y Portovelo.
Según Byron Acosta, gerente general de la empresa, se están analizando otras opciones para invertir en el proyecto, el cual costaría aproximadamente USD 30 millones y generaría cerca de 15 megavatios.