Un trabajador en la planta de Ideal Alambrec Bekaert. Foto: Pavel Calahorrano / EL COMERCIO
En el 2015, un año de menor dinamismo de la economía, la inversión privada creció y superó a la pública por primera vez desde el 2012.
El indicador de formación bruta de capital fijo privado, que mide la inversión que las empresas realizan en activos fijos como instalación o ampliación de fábricas, maquinarias, equipos tecnológicos y otros, subió 11% en el 2015 frente al 2014.
Para Andrés Robalino, director de la Cámara de Industrias de Cuenca, la explicación del crecimiento está en que el presupuesto de inversiones productivo de las empresas se planificó en octubre o noviembre del 2014 y se implementó en los primeros meses del 2015, cuando aún no se daba el bajón económico que se sintió a finales del año pasado.
Una empresa que ya tenía programadas inversiones fue la Sucesores de Jacobo Paredes S. A., que produce la marca de fideos Toscana y Paca. Identificó un mercado potencial en Guayaquil, que hasta entonces consumía más producto importado. Para atender ese nicho implementó dos líneas nuevas de producción con un costo de USD 2,5 millones entre 2014 y 2015, según explicó su gerente Fernando Sánchez.
Los USD 14 120 millones de inversión privada registrada hasta el cierre del 2015, según datos del Banco Central del Ecuador (BCE), representaron un 54% de la inversión total. Así, las empresas fueron un actor dinamizador de la economía, en un año donde la inversión pública cayó 18%.
Según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), a partir del 2016 la inversión pública en el país tendrá dificultades para sostenerse y caerá. El multilateral calcula que el peso de esta en el PIB será del 5,3% en el 2017, mientras la privada se ubicará en el 16,9%.
Hasta el 2006, la empresa privada era el motor de la economía. Por sí sola, era la responsable del 72,8% del total de recursos que se invertían en la economía. Esta tendencia cambió desde del 2007 cuando el Gobierno tomó protagonismo. La participación del sector público en la inversión total pasó del 20% en el 2006 hasta un 58% en el 2013, pero los bajos precios del crudo afectaron los ingresos fiscales, lo que se reflejó en menos obra estatal.
El 24 de septiembre pasado, el presidente Rafael Correa dijo en su enlace de los sábados que las empresas nunca habían ganando tanto como en su mandato. “En promedio, durante la revolución ciudadana, las utilidades empresariales fueron el triple que en los anteriores gobiernos. En 2014, esas ganancias superaron los USD 11 600 millones, cuando en 2006 no llegaron a 4 000 millones (…) Obviamente cambian las circunstancias económicas y el 2015 se redujeron, pero siguen siendo brutales”.
Las empresas no solo que ganaron más en ese período, sino que también invirtieron más. Entre el 2000 y el 2006, las inversiones de las empresas fueron de USD 4 822 millones en promedio. En tanto, que entre el 2007 y el 2015, esta cifra fue de USD 10 652 millones en promedio anual.
El gerente del BCE, Diego Martínez, dijo que el resultado de la inversión privada del año pasado se explica por una inyección de recursos de los sectores manufacturero y minero.
En 2015, la inversión ejecutada en proyectos mineros estratégicos fue de USD 159 millones. De ese monto, un 70% corresponde al megaproyecto de extracción de cobre Mirador, a cargo de la empresa Ecsa. aEntre las empresas que invirtieron están también del sector metalmecánico como Ideal Alambrec Bekaert, que colocó alrededor de USD 6 millones en maquinaria, expansión de su capacidad instalada, entre otros rubros.