El Instituto Oceanográfico de la Armada informó que olas de hasta 1.5 metros de altura golpearán el borde costero del Ecuador. Las autoridades recomendaron tener precaución. Foto: captura de pantalla tomada de Twitter @ECU911PVO
El Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar) informó que olas de hasta 1.5 metros de altura, provenientes del Pacífico Sur, golpearán el borde costero del Ecuador desde hoy, sábado 9 de marzo de 2019, hasta el próximo lunes 11 de marzo.
Se prevé que el oleaje de intensidad moderada provoque en la zona costera continental e insular un mar ligeramente agitado para el fin de semana, mientras que el lunes (11 de marzo) las condiciones disminuirán ligeramente a entre oleaje moderado y ligero. Las olas golpearán la costa entre cada 11 y 15 segundos.
Las condiciones de oleaje coinciden con el periodo de aguaje del 7 al 10 marzo, es decir con las mareas periódicas lunares de mayor amplitud, que se presentan cada 14 días y que ocasionan incremento en el nivel del mar y mayores corrientes.
“La presencia de aguaje aumentará el riesgo de daño en las construcciones cercanas al mar, así como desbordamientos, mayor transporte de sedimentos, generación de fuertes corrientes, por lo que se recomienda tener precaución en la región Insular y todo el borde costero”, previno en un comunicado el Inocar.
El Instituto recomienda a los pobladores de las zonas costeras, turistas y a quienes realizan sus actividades en el borde costero estar atentos a las banderas de advertencia en los balnearios y a los avisos emitidos por los organismos de control, no ingresar al mar solos y en lo posible mantenerse en el área destinada para bañistas.
En caso de ser arrastrados por la corriente de resaca, es imprescindible mantener la calma y no luchar contra la corriente -recomendó el Instituto-, se sugiere nadar en dirección paralela a la orilla hasta que deje de sentir la fuerza de arrastre o mantenerse flotando hasta ser rescatado.
También se recomienda no arrojarse al agua desde escolleras, no perder de vista a los niños en la playa, nadar en paralelo a la orilla y evitar internarse mar adentro. Las zonas rocosas y los muelles son lugares peligrosos para bañarse.