Bogotá, DPA
La ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt pidió hoy no olvidar a quienes siguen como rehenes de la guerrilla de las FARC y dijo que trabaja en el fortalecimiento de una fundación que se encargará de ayudar a los que estuvieron secuestrados.
Betancourt habló al cumplirse el primer aniversario de la “Operación Jaque”, una maniobra encubierta del Ejército que permitió su rescate y el de otros 14 rehenes que estaban en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Los militares engañaron a los guerrilleros haciéndoles creer que eran miembros de una organización humanitaria que iba a trasladar a los secuestrados a otro punto de la selva del sur del país. También fueron liberados tres estadounidenses y 11 militares y policías.
En declaraciones a la cadena radial Caracol, Betancourt coincidió con algunos observadores en el sentido de que después de la “Operación Jaque” se ha visto en el país y el exterior una disminución del interés en el tema del secuestro en Colombia.
“Para mí es muy doloroso pensar que la liberación nuestra sirva de justificación para olvidarlos a ellos o para que no pase nada, para cerrar la página”, dijo en referencia a los 22 militares y policías que permanecen en manos de las FARC.
Betancourt dijo que quiere “hacer algo” y que por ahora lo único que se le ocurre es hablar para que el mundo tome conciencia de lo que ocurre en su país, pero que en el futuro fortalecerá una fundación suya para ayudar a quienes han sido víctimas del secuestro. “¿Qué puedo hacer? Sufro mucho con la situación de mis compañeros y tenemos que tener mucho cuidado para que en cualquier cosa que se haga no seamos instrumentalizados por la guerrilla.
La guerrilla ha hecho del secuestro su carta de presentación y a través de la infamia del secuestro obtiene publicidad”, dijo. Asimismo, se abstuvo de hacer comentarios sobre la decisión del presidente Álvaro Uribe de no aceptar una condición de las FARC para que la senadora opositora Piedad Córdoba esté presente en la entrega de un militar, que fue anunciada en abril pasado y sigue sin concretarse, pues el grupo armado culpa al gobierno de poner trabas.
“No tengo nada que decirle al presidente Uribe. Confío en su decisión, en la rectitud de su proceder y en la bondad de sus intenciones”, dijo. Betancourt agradeció de nuevo a los presidentes de Francia, Nicolas Sarkozy, y de Venezuela, Hugo Chávez, por las gestiones que hicieron a favor de su liberación.
La ex rehén dijo que Chávez es “un humanista” que intercedió para la liberación de varios políticos y que Sarkozy puso el tema del secuestro en Colombia en las primeras planas de la prensa mundial.
Por otra parte, expresó que su libro está adelantado y que espera terminarlo a finales de este año, para que esté a la venta en 2010. Sin embargo, dijo que le ha resultado doloroso recordar las “humillaciones, torturas y vejaciones” que sufrió en la selva desde cuando fue secuestrada, el 23 de febrero de 2002, hasta el 2 de julio del año pasado, cuando recuperó la libertad.
A su turno, Uribe destacó en un acto público el resultado de la operación de rescate y dijo que se necesitan más acciones de este tipo para derrotar las FARC.
“Que hoy sea un momento de reflexión para los colombianos y para la fuerza pública, de ánimo, de recargarse de energías, de ir a la iniciativa. Necesitamos la ‘Operación Jaque’ dos, la tres, la cuatro, la cinco y la seis, hasta que acabemos con estos bandidos”, dijo.
Uribe se refirió al bombardeo efectuado en marzo de 2008 por el Ejército colombiano en contra de un campamento que las FARC tenían en Ecuador y aseguró que sin ese antecedente no hubiera sido posible el rescate.
En el ataque, que produjo la ruptura de relaciones entre Quito y Bogotá, murieron 25 personas, entre ellas alias “Raúl Reyes”, el segundo al mando del grupo guerrillero. “Si no se hubiera hecho el bombardeo sobre el campamento del terrorista ‘Raúl Reyes’, la ‘Operación Jaque’ no habría sido posible, porque ese terrorista desde allá controlaba que mantuvieran a los secuestrados en cautiverio”