Quejas en el barrio Chimbatola, de Nayón, por el incremento del impuesto predial

Quejas de los vecinos de Chimbatola, en la parroquia de Nayón, por el aumento del impuesto predial. Foto: Evelyn Jácome / EL COMERCIO

Quejas de los vecinos de Chimbatola, en la parroquia de Nayón, por el aumento del impuesto predial. Foto: Evelyn Jácome / EL COMERCIO

Quejas de los vecinos de Chimbatola, en la parroquia de Nayón, por el aumento del impuesto predial. Foto: Evelyn Jácome / EL COMERCIO

El valor a pagar por concepto del impuesto predial en los lotes del barrio Chimbatola, en la parroquia de Nayón, en el norte de la capital, llegó en algunos casos a triplicarse.

Alexis Sotalín, oriundo de la zona, cuenta que el 2018 pagó por ese tributo cerca de USD 500. Pero este año, el valor subió a USD 1 500.

Su predio tiene unos 1 500 metros cuadrados. Allí construyó con esfuerzo una vivienda donde habita con su familia. El resto del terreno lo utiliza para sembrar.

Chimbatola es un caserío ubicado en la parte baja de la parroquia donde viven unas 100 familias. La mayoría se dedica a la agricultura.

Sotalín entiende en que el pago del impuesto es necesario, pero dice que no es justo que sea excesivo. “No son casas de lujo. Son viviendas modestas. La gente vive de la tierra. ¿De dónde vamos a pagar?”.

El jueves pasado los vecinos se reunieron para analizar la situación y decidieron protestar y buscar una explicación por parte de las autoridades. Un año atrás, cuando hubo el reavalúo general para equiparar el valor comercial con el catastral en todos los predios de la ciudad, también hubo inconformidad.

Algunos moradores se acogieron al proceso de revisión y consiguieron rebajas, aunque aseguran que fueron mínimas. Esta vez, frente a la nueva alza, piden justicia.

Hay vecinos que el año pasado pagaron USD 1 200, pero este año el valor aumentó a USD 5 000.

Santiago Betancourt, director Tributario del Municipio de Quito, explica que el aumento del impuesto se debe a un alza en el valor del catastro, y que el área tributaria no tiene nada que ver.

Los vecinos aseguran que se han acercado a la Alcaldía para dar a conocer su voz de protesta. “Nos informaron que van a revisar, pero no nos dieron ninguna respuesta por escrito. Indicaron que van a hacer un nuevo avalúo, pero solo fue oral lo que nos dijeron, no hubo ningún documento ni certificado y nosotros quedamos en la nada”.

Según Geovanna Chávez, directora Metropolitana de Catastro, lo que ocurre en el sector de Chimbatola es algo puntual, las quejas no se han generalizado en el Distrito.

Luego de conocer lo que ocurrió en ese barrio, están revisando los casos para saber las causas. Al momento están dimensionando el tema y la próxima semana se tendrá información detallada del problema.

La funcionaria advirtió que usualmente, el valor catastral de un predio aumenta cuando se hacen cambios, ampliaciones, ingreso de propiedades horizontales o modificaciones.

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