En un foro, se discutió sobre la mejor solución para mejorar el tránsito en Guápulo. Foto: Valeria Heredia/ EL COMERCIO
El paso por la calle Camino de Orellana, en Guápulo, debe restringirse. Esa fue una de las propuestas que se escucharon en el Foro de la Ciudad denominado ‘Guápulo: barrio patrimonial o corredor vial’. Se desarrolló este martes 26 de mayo de 2015, a partir de las 17:30.
En este se realizaron varias presentaciones relacionadas a uno de los problemas que aquejan a este sector: el exceso de vehículos que circulan por las vías del sector: Camino de Orellana, De los Conquistadores, Francisco Compte…
Pese a que estas calles son estrechas, los automotores que en su mayoría van hacia Cumbayá, Tumbaco… usan estas vías como una forma de acortar tiempo y camino. Lo que ha traído una afectación en los moradores de este sector.
Según Héctor Vera, presidente del cabildo de Guápulo, la situación debe cambiar. La afluencia de vehículos es demasiado fuerte. Se estima que circulan cerca de 21 000 automotores, al día. Por lo que su propuesta es que se controle este paso constante de vehículos.
Para esto, es necesario que se restrinja la circulación de los automotores. “El Camino de Orellana debería tener acceso únicamente para los carros que vayan hasta el parque del sector. Es decir, se dará prioridad a los vehículos locales. Más no a los que solo utilizan la vía como paso para los valles”.
A largo plazo se espera que una parte de esta vía se convierta en peatonal. “El objetivo es que las personas dejen el carro y se animen a caminar en Guápulo. Sin darle protagonismo al carro”.
Otro de los panelistas de este foro fue Carlos Larreátegui. Él destacó que Guápulo se debe quedar como un barrio patrimonial, porque está a punto de explotar por el paso constante de automotores. Los pitos, los motores y la contaminación son demasiado marcadas en este tiempo. “Hay que encontrar soluciones óptimas para las personas, en la que se dé prioridad a la persona y no al auto”.
Lo mismo dijo Oswaldo Páez, catedrático universitario. Indicó que el objetivo es defender el patrimonio de uno de los barrios más antiguos de la ciudad.
Actualmente, por vías como De los Conquistadores transitan automotores privados y públicos. En este último grupo está la cooperativa Transfloresta, entre otros.