Redacción Deportes
Liga de Quito supo manejar los apremios que tuvo ante Vélez Sarsfield, anoche. Corrigió su juego, mostró solidez y finalmente ganó 2-1 para así clasificarse a las semifinales de la Copa Sudamericana.
El entrenador Jorge Fossati supo corregir los errores que presentó su equipo en el primer tiempo para ganar solidez en la segunda fase.
Durante la primera etapa, los dirigidos por Ricardo Gareca cumplieron a cabalidad el libreto. Con un sistema 4-4-2, Vélez, cuya virtud fue el anticipo y la entrega, superó futbolísticamente a Liga. Atacó incluso con tres jugadores: los arietes López, Leandro Carusso y Maximiliano Morales.
La tarea para los visitantes se facilitó con la poca efectividad en los pases y cambios de frente de los pupilos del DT uruguayo Fossati. Además, Liga también careció de un volante con ideas claras para organizar el juego. Los arietes Claudio Graff y Claudio Bieler fueron fácilmente absorbidos por los defensores gauchos, sin el abastecimiento adecuado.
Las opciones de gol fueron alternadas. A cada ataque de Liga, Vélez respondía con otro similar. La afición, cerca de 25 000 espectadores que llegaron el estadio Casa Blanca, tuvo un espectáculo garantizado, con dos clubes que siempre buscaron el arco contrario.
Hasta que en el minuto 43, tras un pique de Emiliano Papa y un centro rasante, López se adelantó a los zagueros locales y cacheteó el balón para poner la ventaja en el marcador.
Ese escenario cambió en la etapa complementaria para la ‘U’, cuando el cuadro de Liniers, por su ambición ofensiva, pagó caro el esfuerzo. Édison Méndez empezó a producir fútbol en el medio campo y el ingreso de Miller Bolaños, por William Araujo, de bajo rendimiento, otorgó movilidad al conjunto albo.
En el minuto 67, en un tiro libre ejecutado por Méndez desde la izquierda, encontró bien ubicado al paraguayo Enrique Vera, quien peinó el balón para batir al meta Germán Montoya.
A esas alturas del partido, los albos ya eran dueños del campo y de la pelota. Pero el esfuerzo físico que hicieron los visitantes en la primera etapa empezó a sentirse, porque ya no peleaban los balones con la misma intensidad que en los primeros minutos.
Lo más peligroso fue un remate de Morales, quien vio salido al golero Alexander Domínguez, pero el esférico se estrelló en el horizontal y luego picó afuera (60’).
Con ese ímpetu y mejor condición física, llegó el segundo gol de Liga, en el minuto 74. El central Carlos Espínola subió a buscar una pelota y encontró el centro desde la derecha de Néicer Reasco para, de cabeza, vencer otra vez a Montoya.
Con la ventaja en el marcador y un rival que había entregado todo físicamente, Liga generó más oportunidades de gol. Vélez, por su parte, trató de llegar al área rival con desesperación.
Al final, Liga impuso su localía reencontrándose con el fútbol contundente que lo ha caracterizado en esta copa. Mientras que Vélez sufrió los estragos de la altitud y de un equipo que se ha vuelto imbatible en la Casa Blanca. Liga jugará la próxima semana contra el River Plate uruguayo.