Redacción Política
Damián Toro, ciudadano y lector
Hoy se celebra el Día del Periodista. ¿Cuál es la verdadera misión que usted como lector cree que tiene este oficio en la sociedad?
El periodista debe enfocar sus temas de manera objetiva y flexible. Como la imparcialidad es un tema muy difícil de alcanzar, una verdadera utopía, creo que lo más cercano es cumplir con estos dos requisitos que menciono.
¿Qué significa la flexibilidad en el periodismo?
¿Por qué está aquí?
Su experiencia. Tiene 43 años. Es artista, escritor y estudió psicoanálisis. Es un asiduo lector de la prensa nacional.
Su punto de vista. El periodismo es una actividad imprescindible dentro una sociedad y por lo tanto debe ser defendido por todos. Aboga por un oficio más responsable y objetivo.
Si yo abordo un tema con el cual no estoy de acuerdo ideológicamente, tendría que evacuarlo con total objetividad. Esa, para mí, es una muestra de flexibilidad. Si no, corro el riesgo de poner en esa información una opinión propia que a lo mejor no es necesaria.
¿Usted encuentra en la prensa ecuatoriana esa falta de flexibilidad?
No es que vea inflexibilidad. Pero en ciertos casos y temáticas se puede ver una motivación ideológica o política. Precisamente, los temas políticos debieran ser los que se aborden con una mayor objetividad.
¿Es posible que la sociedad ecuatoriana, y dentro de ella la prensa, se haya polarizado debido a los últimos cambios políticos?
Debe ser muy difícil ser flexible cuando hay temáticas tan importantes que se están tratando como la Ley de Comunicación. Eso no quiere decir que los medios hayan tomado una posición de polos opuestos contra el Gobierno. Es un tema muy complejo.
¿Cuál es la fortaleza más importante que usted encuentra en el periodismo ecuatoriano?
Ser incisivo. Esa es la gran cualidad según mi criterio, porque es necesaria para ejercer esta actividad. Sin embargo, encuentro una falta de profesionalismo en muchos aspectos del periodismo.
¿Por ejemplo?
En el periodismo deportivo se hace cualquier comentario de un jugador o un director técnico y ahí quedó la cosa. En otras temáticas, veo que no se citan las fuentes. Creo que hace falta ser mejor profesional y eso no se consigue con un título de periodista. Es una cuestión de responsabilidad.
¿Al periodista le hace falta ser más riguroso?
Sí. Le falta más precisión en el sentido de citar las fuentes, de analizar los temas con mayor flexibilidad y, por lo tanto, ser más objetivo y menos político o ideológico. Sobre todo, en los temas delicados como las leyes que se debaten en la Asamblea o en los casos de corrupción.
¿Cuál es el papel que debe tener el periodista dentro de una sociedad?
El periodismo como tal me parece una actividad indispensable. La función de la persona que va y busca la noticia es algo imprescindible y que tiene que existir de cualquier manera.
¿Si se aplican demasiados controles y regulaciones al ejercicio periodístico, por ejemplo a través de una ley como la de Comunicación, se corre el riesgo de coartar la libertad de expresión?
Se puede llegar a eso si se lo toma desde un punto de vista ideológico. A mí me preocupa mucho la influencia de Hugo Chávez en la región y, tras ver lo que ha pasado en Venezuela con los medios, debemos reflexionar cómo esto puede afectar al Ecuador.
¿Periodismo es sinónimo de libertad de expresión?
No necesariamente. Si el periodismo no es objetivo o flexible puede ocasionar la falta de esta libertad y prestarse para la manipulación de información. Si hay manipulación no hay libertad.
¿El ciudadano ve al periodista como un interlocutor ante la sociedad y el Estado?
Sí. En general, todo el sistema de comunicación de una sociedad ejerce una función fundamental, porque no todos los ciudadanos podemos ponernos a buscar noticias.
Sin embargo, hay muchos sectores que hablan de un alejamiento entre la prensa y el ciudadano. ¿Usted siente ese distanciamiento?
Es una pregunta complicada.
¿Por qué?
Amerita un análisis sociológico e histórico. En los últimos años, la sociedad ha demandado más justicia e igualdad, y a mí sí me parece que, en ciertos momentos, ha habido ese distanciamiento entre lo que se enfoca como noticia y lo que verdaderamente vive el país.
¿A qué se debe este comportamiento?
Hay un problema de enfoque. Surge un tema y la prensa los aborda de manera avasalladora y dejamos de lado otras cosas que ocurren. Es algo que no se hace a propósito. También veo mucha politización en la noticias.
¿En este país corre peligro el ejercicio periodístico?
Yo sí lo creo. Este es un Gobierno mediático, que busca llegar a la gente a través de los medios. Por eso quiere controlarlos.
¿Quién tiene que dar la lucha para fortalecer el periodismo y defender su misión?
La responsabilidad debe ser compartida. Quienes estudian periodismo deben comprender mejor su profesión. La sociedad en su conjunto, creo yo, está dejando solos a los periodistas para que se defiendan en estos momentos y eso no puede pasar.
¿Qué hacer, entonces?
Los periodistas deben hacer las cosas con responsabilidad. Si la sociedad no defiende la vigencia de esta libertad, los periodistas tendrán que defenderla incluso de una manera política. Solo espero que ese sea un caso extremo.