Redacción Política
Ni un caldo de patas que ofreció la Presidencia de la República a los presentes destrabó el debate entre el Régimen y las organizaciones indígenas agrupadas en la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie). Los dirigentes rechazaron la invitación de la Casa de Gobierno, pues priorizaron los diálogos y que en el texto del acuerdo consten los puntos que eran de su interés.
Después de seis horas y media de intensos cabildeos, finalmente los indígenas acordaron firmar el documento de seis puntos.
A las 21:48, el presidente de la Conaie, Marlon Santi, y el presidente de la Confenaice, Tito Puenchir, accedieron a poner sus firmas en el documento en el cual se recogieron los acuerdos alcanzados durante la jornada de diálogo, en la que participaron el presidente Rafael Correa, el vicepresidente Lenín Moreno y 10 ministros de Estado. Por parte del Gobierno firmaron la Secretaria de los Pueblos, Doris Soliz y el vicepresidente Lenin Moreno, como testigo de honor.
El levantamiento de la medida de hecho que afecta a varias provincias de la Sierra y Amazonia, sin embargo, no se anunció anoche, pues según Marlon Santi, esa decisión se adoptará en una asamblea que se desarrollará entre hoy y mañana.
Ese fue el anuncio que realizaron a las 22:00, frente a Carondelet, ante unos 200 indígenas que aún permanecían en la Plaza de la Independencia. “Hemos logrado nuestras exigencias, ahora regresemos a trabajar para que los derechos de los pueblos sean respetados”, acotó Puenchir.
Uno de los temas polémicos del acuerdo fue la propuesta indígena de que las provincias de Pastaza y Morona Santiago sean declaradas ecológicamente responsables y, por lo tanto, se prohíban las actividades mineras y petroleras.
Tito Puenchir, presidente de la Confenaice, insistió en que es necesario que ese sea un séptimo punto del acuerdo. “Es una necesidad y un pedido de las comunidades. No podemos ir a nuestras provincias sin tener un pronunciamiento en ese sentido”, manifestó el dirigente amazónico.
Al final se impuso la propuesta del Ejecutivo: que el tema sea parte de las mesas de diálogo multisectoriales que se instalarán con la participación de ministros, el Consejo de Desarrollo de los Pueblos del Ecuador y delegados de las comunidades indígenas.
La Secretaría de los Pueblos será la responsable de organizar el funcionamiento de estas comisiones. El Gobierno Nacional también tendrá que garantizar el presupuesto, logística y detalles operativos de estas instancias.
No se estableció fecha para la instalación de la primera reunión, pero se acordó que será en la Amazonia.
En el cabildeo también se abordó el tema de las investigaciones a los responsables de la muerte del profesor Bosco Wisum, ocurrida el miércoles anterior, en Macas. Esa fue una de las condiciones que puso el presidente Correa al instalar el diálogo, que se desarrolló en el Salón de Banquetes del Palacio Nacional.
Al final, los indígenas accedieron a que se incluya esa investigación, pero sin especificar a los dirigentes de la comunidad shuar. Ellos pidieron que en la indagación también se incluyan a las autoridades del Gobierno.
El diálogo Gobierno-indígenas se desarrolló en dos partes. Desde las 15:30 hasta las 19:30 estuvo presidida por el presidente Rafael Correa y sus ministros.
Ahí el Primer Mandatario enfrentó el reclamo de los dirigentes de las comunidades y de los representantes de las bases.
Se vivieron momentos de tensión, especialmente cuanto Marlon Santi exigió respeto para los dirigentes de las organizaciones. Su reclamo fue por las expresiones en contra de los dirigentes. “Quién les ha tratado de locos, para de inmediato despedirle del Gobierno”, preguntó Correa.
Santi fue directo en su respuesta. “Usted, señor Presidente”, dijo en medio del festejo de los asistentes a la cita.
Delfín Tenesaca, del Movimiento Indígena de Chimborazo, también cuestionó la presencia en el gabinete de Alexis Mera, Vinicio Alvarado, Raúl Vallejo… “Ellos son los representes de la partidocracia a la que usted dice combatir”, manifestó.
Los acuerdos
Se institucionaliza un diálogo permanente. Se trabajará con la agenda propuesta por la Conaie.
El diálogo se articulará con una comisión de alto nivel del Gobierno y las comunidades.
Se fortalecerá la educación intercultural bilingüe y las autoridades serán escogidas a través de concurso de oposición.
Una comisión especial analizará el proyecto de Ley de Agua de la Conaie y el oficial para llevarlo a la Asamblea Nacional.
La Comisión de la Verdad investigará la muerte del shuar, Bosco Wizum. Se sumarán dos delegados de la Presidencia de la República y dos de la Conaie.
Se analizarán las propuestas de reforma para la Ley de Minería. Estos contenidos se formalizarán en un Decretó Ejecutivo.