Con una respiración profunda y un estiramiento de brazos y piernas se inició el miércoles pasado el taller para 18 mediadores de la Bienal Internacional de Cuenca. El objetivo fue predisponer la mente para iniciar el aprendizaje.
Este grupo colaborará en la edición número 12 de la Bienal, que se inaugurará la noche del 28 de este mes, en el Teatro Carlos Cueva Tamariz. Los mediadores serán el nexo entre las obras de los 42 artistas participantes y el público. Las obras se exhibirán en el Museo de Arte Moderno, Colegio Benigno Malo, Casa de los Arcos, Sala Proceso, Salón del Pueblo y capilla del Museo de la Medicina. Allí, laborarán estos 18 mediadores.
En el auditorio de la Bienal de Cuenca, ellos y los instructores Verónica Pons, Priscila Peralta, Adrián Chuquinguanga y Paola Montalván realizaron un taller sobre cómo llegar al público que visite durante tres meses la exposición de la Bienal.
Con la ayuda de un proyector y de un computador, Chuquinguanga abordó el tema de las Inteligencias Múltiples. Explicó que el ser humano tiene diversas maneras de captar y que es necesario que el mediador identifique el tipo de inteligencia que tiene la persona que visite el museo.
Entre los tipos de inteligencia que vieron estaban: lingüística verbal, lógica-matemática, espacial, musical, corporal, intrapersonal, interpersonal y naturalista. La instructora caminaba en medio del auditorio con la finalidad de poner como ejemplo a los mediadores. Y enfatizaba en la importancia de que ellos permanezcan atentos y en movimiento cuando lleguen los espectadores. Según Chuquinguanga, el mediador debe identificar si ese grupo o personas tienen una inteligencia lingüística para que emplee el recurso verbal en su explicación. De lo contrario, si el visitante tiene desarrollada la inteligencia corporal tendrá que efectuar movimientos con sus manos o rostro para llegar al público.
La Bienal hizo una convocatoria para que se presentaran artistas que quisiesen colaborar como mediadores. Thelma Cazorla, de 27 años, fue una de las escogidas. Para ella es importante que el público realice una reflexión alrededor del planteamiento de las obras, para que llegue a sus propias conclusiones. “De esta manera, se logrará que se comprenda que el arte contemporáneo está abierto a todo el mundo y no a un determinado público”.
El taller continuó con la exposición de Paola Montalván. Ella hizo referencia a cómo lograr que el público aprenda de la exposición y dio consejos para basarse en elementos visuales, auditivos, reflexivos, cinestésicos y activos.
Montalván se enfocó en que el mediador debe dejar que el público sea el que participe e indague en las obras. Para ello, los mediadores deben determinar qué mecanismos emplear para reforzar el aprendizaje; hay personas totalmente visuales y otras a las que les gusta escuchar o analizar cada detalle.
Según Ruth Matute, de 30 años, quien por segunda ocasión será mediadora de la Bienal, por primera vez reciben una capacitación. Para ella, es difícil cuando llegan a los museos grupos de niños, porque quieren tocar las obras y hay que buscar mecanismos para su comprensión.
Suamy Vallejo, de 23 años, también será mediadora por segunda ocasión. “Lo principal es conocer la obra para despejar toda inquietud”. También considera que es importante propiciar que el público sea consciente que el arte es un medio de aprendizaje universal.
Un ‘tip’ fundamental para el mediador: identificar el tipo de público (edad, nacionalidad o trabajo). Estas preguntas lograrán romper el formalismo.
Los guías en las diferentes salas llevarán una identificación plástica para que el público asistente los pueda reconocer. Verónica Pons, coordinadora del Departamento de Educación de la Bienal, señaló que la capacitación se basó en el eje de educación, con el fin de identificar las necesidades del público y sobre todo lograr una conexión con el facilitador.
Los directivos de la Bienal de Cuenca consideran que es importante que el público tenga un nexo para que pueda conocer de mejor manera las obras y el mensaje que transmiten. Por eso se contrató a los mediadores, que son artistas.
Conozca a los 42 artistas que serán parte de la 12 edición de la Bienal de Cuenca