Zunino y Pilco fueron detenidos el 28 de octubre pasado por colocar pancartas en Guayaquil, donde se declaraba persona no grata al presidente Rafael Correa.
Para Juan Carlos Sánchez, integrante de la nueva Junta Cívica, la acusación de separatismo “es infundada”, ya que se dio una opinión sobre el Primer Mandatario, de manera libre, democrática y con absoluto respeto. Por este motivo el abogado de los imputados presentó una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Fundamedios recordó que uno de los principios esenciales para preservar la libertad de expresión y la democracia es que los funcionarios y servidores públicos acepten que están más expuestos a la crítica, aunque estas sean duras.