Redacción Guayaquil
Las actividades que el ruso Denis Aleksandrovich V. desarrolló durante los tres últimos años en Ecuador son rastreados por la Fiscalía.
El extranjero, de 32 años, era buscado por la Interpol desde el 3 de diciembre de 2008. Enfrenta cargos por almacenamiento ilegal de armas y homicidio, ambos delitos supuestamente cometidos en su país.
Uno de los delitos, según la Interpol, fue cometido el 28 de septiembre de 2003 cuando junto a sus compatriotas Igor O. y Maxim M., ingresaron a una vivienda de Kaliningrado y agredieron a sus ocupantes con cuchillos.
Además, dispararon y asesinaron a una de las víctimas y otra quedó gravemente herida. Las leyes de Rusia establecen sanciones de hasta cadena perpetua por esos hechos.
La alerta roja fue difundida en los 188 países que son parte de la Interpol y que tienen convenios de extradición. Entre ellos, Ecuador, cuyo presidente de la Corte Nacional de Justicia, José Vicente Troya, dictó la orden para su detención.
Su captura ocurrió la madrugada del 19 de septiembre pasado, cuando fue requerido por agentes de la Policía durante un operativo regular de tránsito en las calles Los Ríos y Vicente Trujillo, al sur de Guayaquil. Iba en un jeep Hyundai Tucson, color beige, de placas GQF-487, y estaba acompañado de una mujer.
Extraoficialmente se conoció que ya fue deportado, pero la fiscal Mónica Rivera, de la Unidad de Delitos Migratorios, indaga cómo regularizó su permanencia en este país. Pues tenía visa de inversionista y era apoderado de una empresa constructora.