Fotorradares de Huaca duraron apenas cinco meses y 15 días
El gobernador del Carchi, Edin Moreno, fue el encargado de colocar una funda sobre el fotorradar en la E-35. Foto: Alvaro Pineda para EL COMERCIO
La operación de los fotorradares de la ruta E-35, que une Imbabura con Carchi, se suspendió oficialmente el lunes 8 de abril del 2019 luego de que la Empresa de Movilidad del Norte (Movidelnor), que maneja el tránsito en 15 cantones de Carchi, Imbabura, Esmeraldas y Pichincha, recibió una notificación del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP).
El documento ordenaba el retiro inmediato de los dispositivos electrónicos, que entraron en funcionamiento el 24 de octubre del 2018. De esta manera se aceptó el pedido de los transportistas y usuarios de la ruta E-35 que aseguraban sentirse afectados por la colocación de los radares.
Pablo Cerón, dirigente del Transporte Pesado del Carchi, considera que la ubicación de los dos puntos de control es antitécnica. “Los conductores viajan a 90 km por hora, como está permitido en la E-35. Sin embargo, deben frenar de golpe para reducir la velocidad 48 km por hora y no ser sancionados”.
Muchos conductores, especialmente, choferes que trabajan en las carreteras y turistas que visitan la región han sido multados, asegura el líder gremial.
La suspensión de los aparatos estuvo antecedida de una marcha en la que participaron aproximadamente 300 personas. El grupo estuvo encabezado por Carlos Gómez, subsecretario de Gobernabilidad del Ministerio del Interior, y Edin Moreno, gobernador del Carchi.
Ellos fueron los encargados de subir a una escalera y cubrir los fotorradares con una carpa de lona, con los colores del Carchi y del Ecuador, que llevaron los transportistas. Esa fue la acción de protestas que se cumplió en medio de la mirada de policías y transeúntes.
Según Gómez, la suspensión del funcionamiento de los dispositivos se debió a que Movildenor y Traficnor, la empresa propietaria de los sensores, no habrían cumplidos los protocolos previsto para instalar medidas de seguridad vial. Entre ellos, se aseguró, no hubo la debida socialización y capacitación de los usuarios de este ramo de la carretera. Es por ello que el MTOP, en calidad de rector del tránsito y transporte nacional, tomaron la decisión de suspenderlos.
Los habitantes del Carchi consideran la medida una conquista de la provincia. Jairo Pozo, presidente del Comité Cívico para la Reactivación Económica de la localidad fronteriza, recordó que este fue uno de los pedidos que se hicieron al Gobierno central durante el paro provincial del 26 de noviembre pasado, para exigir atención ante la crisis local.
También explicó que, a la par, se presentarán medidas de amparo para que los conductores que han sido recientemente sancionados no paguen las multas y para que se les devuelva el dinero a los que han cancelado antes.
Los conductores que circulaban entre 50 y 60 km por hora eran sancionados con el 30% del salario básico y los que superaban el rango de 60 km de velocidad, el 100%.
Movildenor no se ha pronunciado hasta el momento. Sin embargo, Gómez aseguró que dialogó con Édgar López, gerente de Movildenor, y que se comprometió a desactivar inmediatamente los sensores.