Un colorido sofá público se instaló en La Floresta para el disfrute de los vecinos

El sofá es parte de un proyecto que lleva tres años para que las calles de La Floresta no se

El sofá es parte de un proyecto que lleva tres años para que las calles de La Floresta no se "vuelvan vías de desfogue vehicular"

Lo bautizaron con el nombre de ‘Parquito’. En un sitio construido de madera y está adornado con masetas de flores y geranios. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO

Un sofá público se instaló en las calles Valladolid y Vizcaya, en el tradicional barrio La Floresta, en el centro-norte de la capital. La finalidad es que los transeúntes y vecinos puedan disfrutar de este espacio.

Lo bautizaron con el nombre de ‘Parquito’. En un sitio construido de madera y está adornado con masetas de flores y geranios, además los asientos fueron decorados con tejidos de distintos colores. La estructura mide alrededor de cinco metros y se ubica en las afueras del cine Ochoymedio.

En el lugar los ciudadanos que circulan por ahí pueden sentarse a leer un libro, conversar con un amigo, disfrutar de una comida o simplemente descansar y observar el paisaje urbanístico. El árbol que brinda sombra al sofá público también está decorado con un tejido de colores llamativos.

El barrio La Floresta, en su red social de Facebook, escribió un mensaje alusivo al ‘Parquito’: “Tenemos el primer sofá público en #LaFloresta en el parquito de la Valladolid y Vizcaya, suavito, bien guapo y con mucho color. Las crocheteras terminaron su labor y se aprestan ahora a abrigar con sus lanas, a las palmeras degolladas frente al parqueadero del Hotel Quito. Vengan, disfrútenlo, tómense fotos, coman sus lunch, descansen en él, que los #Parquitos son para disfrute de la gente”.

El sofá es parte de un proyecto que lleva tres años para que las calles de La Floresta no se "vuelvan vías de desfogue vehicular". Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO

Mariana Andrade, directora del Ochoymedio y miembro del Comité pro mejoras del barrio, manifiesta que junto a los vecinos decidieron unirse para “construir ese mobiliario urbano para el disfrute de la gente”.

El sofá es parte de un proyecto que lleva tres años para que las calles de La Floresta no se "vuelvan vías de desfogue vehicular", dice Andrade. La idea es que los vecinos y asistentes puedan tener un entorno amigable.

El proyecto está avalado por el Instituto Metropolitano de Patrimonio de Planificación Urbana y se sostiene en la Ordenanza 170 del Sistema de Estacionamientos y Terminales Terrestres del Distrito Metropolitano.

En el artículo 2 de la ordenanza se propone “mejorar la calidad del espacio público, beneficiando a los residentes y peatones, racionalizando el uso del vehículo particular y priorizando el transporte público y el transporte alternativo”.

En la mañana de este jueves 25 de julio del 2019 un grupo de muchachos disfrutó del espacio. Uno de ellos, Darwin Salcedo, destacó la importancia de este tipo de proyectos que “buscan que la gente se tome los espacios y pueda compartir”.

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