Los trabajadores de emergencia vigilan el avance de los huracanes y se preparan para la llegada a tierra del huracán Florence, en el centro de operaciones de emergencia, en Wilmington, Carolina del Norte, el 12 de septiembre de 2018. Foto: AFP
El huracán Florence categoría 3 redujo de nuevo muy levemente sus vientos máximos sostenidos a 115 millas por hora (185 km/h), pero no su peligrosidad, mientras avanza hacia Las Carolinas, en la costa sureste de Estados Unidos, adonde llegará el viernes (14 de septiembre del 2018).
En su boletín de las 20:00 hora local (24:00 GMT), el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés) señaló que está a 355 millas (540 kilómetros) al sureste de Willmington (Carolina del Norte), y a 370 millas (595 km/h) al este-sureste de Myrtle Beach (Carolina del Sur), hacia donde se dirige con una velocidad de traslación de 16 millas por hora (26 km/h).
Según la agencia federal, los vientos huracanados se extienden hasta 70 millas (110 km) desde el centro del sistema.
De igual forma, los vientos con fuerza de tormenta tropical se expanden hasta 195 millas (315 km).
Gente sentada frente al río y una gran nube de lluvia pasa antes de la llegada del huracán Florence en Wilmington, Carolina del Norte, el 12 de septiembre de 2018. Foto: AFP
El centro ha advertido durante el día de que las dimensiones de Florence “han aumentado” y mantiene su potencial de “marejadas ciclónicas y lluvias que ponen en peligro la vida humana” en amplias zonas de la costa sureste estadounidense.
Según un probable patrón de trayectoria creado por el NHC, el vórtice de Florence se moverá hoy por el suroeste del Atlántico, entre Bermudas y las Bahamas, y se acercará a la costa de Carolina del Norte y Carolina del Sur el viernes.
“Se esperan algunas fluctuaciones en la intensidad del sistema hasta el jueves”, aunque se prevé un “lento debilitamiento” a partir del jueves por la tarde, agregaron los meteorólogos del NHC, con sede en Miami.
Sin embargo, se pronostica que Florence sea todavía un “extremadamente peligroso huracán de categoría mayor cuando se aproxime a la costa estadounidense” el jueves por la tarde y el viernes.
Los expertos del NHC alertaron de nuevo sobre el gran peligro de “marejada ciclónica” a lo largo de las costas de Carolina del Norte y Carolina del Sur.
Personas evacúan antes de la llegada prevista del Huracán Florence y buscan refugio hoy, miércoles 12 de septiembre de 2018, en la Burgaw Middle School, en Burgaw, Carolina del Norte (EE.UU.). Foto: EFE
Con la aproximación de Florence a EE.UU., el NHC emitió una aviso de huracán desde South Santee River (Carolina del Sur) hasta Duck, Albemarle y Pamlico Sounds (Carolina del Norte), y una vigilancia de huracán desde Edisto Beach (Carolina del Sur) hasta Carolina del Norte y la frontera con Virginia.
Se mantiene un aviso de marejada ciclónica en la zona, donde el NHC alerta de que “existe la posibilidad de inundaciones que amenacen la vida” debido a un aumento del nivel del mar “moviéndose tierra adentro” en las próximas 48 horas.
La peligrosa marejada ciclónica causará que áreas que son normalmente secas cerca de la costa “se inunden por un aumento del nivel” del mar que podría alcanzar entre 9 y 13 pies (2,7 a 4 metros) de altura desde Cabo Fear a Cabo Lookout, incluidos Neuse, Pamlico y Pungo, con “grandes y destructivas olas”, resaltaron los meteorólogos.
Además, se espera que Florence produzca acumulaciones totales de lluvia de entre 20 y 30 pulgadas (50-76 centímetros) con cantidades aisladas de 40 pulgadas en zonas de Carolina del Norte y Carolina del Sur.
Además de Florence, en el Atlántico está activo otro huracán, Helene, que perdió hoy (12 de septiembre del 2018) intensidad y pasó a categoría 1 al bajar sus vientos máximos sostenidos a 85 millas por hora (140 km/h) en la escala de Saffir-Simpson, de un máximo de 5.
Helene se encuentra a 910 millas (1.465 kilómetros) al oeste-noroeste de las islas de Cabo Verde, en la costa noroeste africana, y a 1 285 millas (2 065 kilómetros) al sur-suroeste de las islas Azores.
Se desplaza hacia el norte–noroeste con una velocidad de traslación de 14 millas por hora (22 km/h) y girará hacia norte y noreste en las próximas 48 horas.
Los expertos vaticinan que Helene experimentará un “gradual debilitamiento” durante las próximas 48 horas y “se degradará a tormenta tropical el jueves”.
Al norte de la ubicación de Helene se encuentra la recién formada tormenta tropical Joyce, que, con vientos de 45 millas por hora (75 km/h), se mueve hacia el archipiélago portugués de las islas Azores, hacia donde podría llegar la próxima semana.
Más al sur está la tormenta tropical Isaac, que avanza hacia el oeste y vientos máximos sostenidos e invariables de 60 millas por hora (95 km/h) hacia el Caribe y las Antillas Menores, islas que podría impactar en la tarde de este jueves.