Fiscalía sueca pide a Apelación que mantenga orden de arresto contra Julián Assange

Julián Assange

Julián Assange

La Fiscalía sueca pidió hoy (23 de septiembre del 2014) al Tribunal de Apelación de Svea que mantenga la orden de prisión preventiva en ausencia dictada en 2010 contra el fundador de WikiLeaks, Julián Assange, por cuatro presuntos delitos sexuales.

Apelación debe estudiar una demanda de la defensa del periodista australiano, que recurrió la decisión de primera instancia de no permitir que se celebre una nueva audiencia sobre el caso.

La declaración enviada a Apelación por la Fiscalía sostiene que todavía existen "razones fundadas" para mantener la orden de arresto y que el riesgo de fuga permanece inalterado, por lo que no hay motivo para que haya una audiencia.

La defensa de Assange presentó en junio una petición reclamando una nueva vista por el tiempo transcurrido desde la orden de arresto y las circunstancias del periodista, que lleva dos años viviendo en la embajada de Ecuador en Londres, donde se refugió después de que el Tribunal Supremo británico ordenara su extradición a Suecia.

La petición fue rechazada porque el juez consideró necesario mantener la orden "para intentar garantizar que la investigación en torno a las sospechas y un eventual proceso judicial puedan ser realizados", siguiendo las recomendaciones de la Fiscalía.

Ecuador concedió asilo político a Assange por temor a que fuera enviado de Suecia a Estados Unidos, donde podría afrontar un juicio militar por la información confidencial difundida a través del portal de filtraciones de internet WikiLeaks.

La defensa ha reclamado varias veces que Assange, de 43 años, sea interrogado en la embajada de Ecuador, posibilidad que rechaza la Fiscalía alegando que es necesario que el sospechoso esté presente para ser interrogado en la investigación preliminar de los delitos.

Assange está acusado de cuatro delitos contra dos mujeres, que él niega, cuando estaba de visita en Suecia en agosto de 2010.
El proceso ha estado rodeado de polémica sobre la solidez de las denuncias y los motivos de las demandantes, filtraciones a los medios, sustituciones de fiscales y una reapertura del caso, que había sido reducido inicialmente a un delito menor.

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