Redacción Negocios
negocios@elcomercio.com
Su teléfono empezó a timbrar con más frecuencia en las últimas tres semanas. “¿Qué está pasando con el Supermaxi?”, preguntaban a un alto ejecutivo de esta cadena de supermercados, que cerró con USD 1 100 millones de ventas en 2008.
“¿A qué te refieres?”, decía al principio, pero enseguida se dio cuenta que la inquietud era una. “El precio de las acciones está cayendo, ¿qué pasa?”.
Según este gerente de Supermercados La Favorita, “en las últimas semanas, el valor de las acciones en la Bolsa de Valores sufrió un descenso adicional al que se viene registrando desde agosto de 2008. Esta caída más sostenida es fruto del anuncio del nuevo impuesto del 10% a los dividendos que el Gobierno prevé plasmar a través de la Reforma Tributaria.
“Esa situación resta atractivo y baja el precio de las acciones, ya que las expectativas de retorno sobre inversión disminuyen”.
Desde agosto de 2008, el valor de las acciones de las ocho principales empresas que están en la Bolsa de Valores ha caído un 20%, en promedio.
Para Mónica Villagómez, titular de la Bolsa de Valores de Quito, esa disminución obedece “a un impacto mundial sobre las acciones, que ha impactado a los diferentes países en mayor o menor medida. A eso se suma el susto que ocasiona el hecho de pretender gravar al dividendo de las empresas. Ese nerviosismo presiona a las personas a vender. Y, a mayor oferta, menor precio”.
De hecho, el Ecuindex, el índice nacional de precios y cotizaciones del mercado ecuatoriano, que refleja el desenvolvimiento del mercado bursátil nacional, llegó a su nivel más bajo desde 2006, al ubicarse ayer en 807,46 puntos. La caída en los últimos 10 días fue del 2,79% y del 23% respecto a septiembre de 2008.
Sin embargo, para Villagómez esta no es una situación para alarmarse. “El precio de las acciones no necesariamente tiene que ver con el estado de la empresa. Tenemos una compañía fuerte como Supermercados La Favorita que ve reducirse el valor de sus acciones.
La caída se está produciendo por la incertidumbre en el país”.
Fernando Simo, gerente de Produvalores, también coincide en que la incertidumbre es la causa primordial de la baja. “Los resultados de las empresas no han sido malos. En el caso de Produbanco, en realidad no tienen mayor volatilidad. Pero su valor tampoco sube porque hay la percepción de que el sistema financiero tiene algún defecto. A ello hay que sumar las medidas que ha aplicado el Gobierno a la banca. Eso afecta”.
¿Y cómo impacta esta caída al tenedor de acciones? Fernando Ortiz, presidente ejecutivo de MerchantValores, señala que “si una empresa generó una utilidad del 12% y le van a imponer un impuesto adicional del 10% a sus dividendos, el accionista ya no recibirá el 12%, sino un 10,8%. Eso, asumiendo que la empresa generará la misma utilidad este año. Pero estamos en crisis, entonces, probablemente, la utilidad baje”.
Por el lado de la empresas, en cambio, Ortiz asegura que, “si quiere mantener la misma rentabilidad que el año pasado, deberá o bien reducir costos, trabajando mucho más, o bien transfiriendo el costo al consumidor final. Las empresas actualmente están al límite de su rentabilidad, por lo que la opción es aumentar precios. Y eso lo pagaremos todos”.
Para las Bolsas, en cambio, la caída de acciones no representa un riesgo. Villagómez afirma que “las acciones representan solo un 6% de la actividad de la Bolsa”.
Punto de Vista
Édison Ortiz / Experto en Bolsa
El escenario político afecta Hay algunos factores que influyen para que el precio de una acción caiga. En Ecuador influye hoy, principalmente, la falta de liquidez de la gente y la incertidumbre político-económica.
Las personas que tienen acciones quieren venderlas por un miedo que no han tenido antes. No tratan de vender sus acciones por los resultados de las empresas -al contrario, tuvieron buenas utilidades en el ejercicio 2008- sino porque el Gobierno genera un ambiente negativo. Cuando la persona escucha que le impondrán un impuesto adicional a los dividendos de las compañías, siente que sus acciones ya no serán tan rentables y vende.
Por eso, el tiempo es importantísimo en la compraventa de una acción. Ahora que hay mucha oferta en el mercado y poca liquidez para comprarlas, el precio de las acciones se pone a la baja. Para quien le gusta correr un riego mitigable, este puede ser un momento ideal para comprar.