Redacción Judicial
La polémica por la muerte de la joven francesa Charlotte Mazoyer continúa. La familia de la muchacha entabló una demanda en contra de la Clínica Pichincha porque supuestamente “se negó a prestarle atención a Mazoyer, que estaba en estado crítico”.
Las investigaciones
La Fiscalía tomó las versiones de varios testigos del caso. Además, pidió el registro de la llamada de auxilio al 911 y el video de seguridad de la Clínica Pichincha, donde se ven todos los hechos del 12 de septiembre.
Los padres de la joven consultaron el caso de Charlotte con los galenos franceses Jean Noel Fabiani, director del Servicio de Cirugía Torácica y Cardiovascular del Hospital Georges Pompidou en París; e Iradj Grandkbach, especialista del Hospital de la Pitié Salpéntriére en París.
El papá de Mazoyer es médico con especialidad en Neuroradiología, su tío Christophe Tzourio es médico con especialidad en Neurología. Su madre también es médica e investigadora.La joven llegó a la Clínica Pichincha consciente, hablaba y pedía a los paramédicos que no la dejaran morir… Su corazón, el pulmón derecho y el hígado estaban desgarrados por un disparo.
El 12 de septiembre pasado, a las 19:30, recibió un disparo a quemarropa, cuando tres delincuentes intentaron asaltarla. Vecinos de su casa, en el sector de Guápulo, la auxiliaron de inmediato. La ambulancia llegó cerca de 30 minutos después.
Francisco Crespo la acompañó mientras la llevaban a una casa de salud. Durante el viaje llamó a los funcionarios de la Embajada de Francia para que ayudaran a la joven de 27 años. La paramédico, Viviana Ponce, llamó por radio al hospital Eugenio Espejo para que recibieran a Mazoyer, pero el sitio estaba lleno. “Yo decidí llevarla a la Clínica Pichincha porque estaba cerca y cuenta con todos los equipos necesarios para tratar este tipo de traumas”, declaró Ponce en la Defensoría del Pueblo.
La ambulancia llegó al hospital a las 20:09. Mazoyer entró por Emergencias. Este momento marcó el inicio de la polémica entre la familia de la joven y los médicos de la Clínica Pichincha.
Los familiares acusan a la institución de haberle “negado la atención a Mazoyer, quien había sufrido un trauma de consideración”, sostuvo Emiliano Donoso, defensor de los franceses.
Su argumento se basa en que la Clínica condicionó el tratamiento de calidad a la entrega de una tarjeta de crédito como garantía, pues, a su criterio, los principales exámenes que permitieron determinar la gravedad del problema médico se efectuaron a partir de las 21:13, cuando se presentó una tarjeta como respaldo.
Sin embargo, Francisco López, representante legal de la casa de salud, asegura que “nunca hubo ninguna petición de la tarjeta de crédito, pues quien entregó el documento llegó una hora después. Mientras tanto, se le dio la atención necesaria”.
Una de sus amigas, Julie B., quien llegó a la Clínica a las 20:40 aproximadamente, contó que se le pidió una garantía para el tratamiento de Mazoyer. Por lo que llamó a los contactos que estaban registrados en el celular de la joven. Uno de ellos, Ronald T., llamó a su madre, Leticia Pozo, para que prestara su tarjeta. Ella acudió de inmediato. Esto sucedió a las 21:13.
“A partir de esa hora recién se le practicaron los exámenes necesarios. Pero ya había pasado más de una hora y el estado de salud de Charlotte era crítico. Su presión bajó rápidamente. Estaba en un shock”, manifestó Donoso.
Paúl Venegas, amigo de la joven, dijo que cuando llegó a la clínica, a las 22:30, todavía no la habían operado, para extraerle la bala.
‘Se debió precautelar la salud de nuestra hija y no se lo hizo’.
Bernard Mazoyer
Padre de Charlotte
‘Le dimos la atención necesaria y cumplimos los protocolos médicos’.
Francisco López
Representante de Clínica PichinchaPero López recalcó que desde que llegó se le realizó una serie de procedimientos médicos y quirúrgicos para tratar de salvar su vida. “A las 20:22 se obtuvo la primera placa de rayos X. Ahí se vio que Mazoyer tenía una colección de sangre en el lado derecho. Pero el mediastino no estaba alterado y no se vio una hemorragia en el corazón. Además, no se encontró el proyectil”, dijo López.
La Clínica llamó al cirujano general Carlos L. a las 20:41 y, según la casa de salud, llegó a las 20:46.
Él realizó un toracotomía (poner un drenaje) en el pulmón derecho. Este tratamiento sirvió para que el pulmón se expandiera y se evacuara la sangre que afectaba su respiración. Esto está estipulado en el Manual de Tratamiento de Trauma ATLS (Advanced Trauma Life Support). “Se debe primero tratar la vía aérea y ver que no esté interrumpida. Luego se trata la parte respiratoria y luego lo sanguíneo”, puntualizó López.
Este Diario consultó a otros médicos sobre el tratamiento de Mazoyer y aseguraron que el ATLS es un procedimiento que debe aplicarse pero en una primera etapa. “Cuando un paciente llega con una herida de bala se debe operar de inmediato para cerrar las heridas y buscar la bala. No se puede perder tiempo”, dijo un galeno.
Este argumento es el mismo de los padres de Mazoyer. “Es importante observar que por el grave cuadro clínico que presentaba nuestra hija, apenas llegó debió haber sido ingresada al quirófano”, sostuvo en su denuncia ante la Fiscalía Bernard Mazoyer.
Sin embargo, para López “el asunto médico se deberá aclarar con los estudios de los peritos y análisis médicos. La paciente recibió atención médica inmediata, no se la negó. Nosotros tenemos las pruebas necesarias para demostrar nuestra afirmación”.
6 horas aproximadamente pasaron entre que Charlotte Mazoyer fue herida y su muerte.A las 21:08 se tomó otra placa de rayos X y se encontró un neumotórax en el lado izquierdo, es decir que el pulmón de ese lado también había colapsado y se le colocó otro catéter en ese lado.
A las 21:13 se presentó la tarjeta de crédito y a las 21:15 se le puso una vía central de alto flujo en la vena subclavia, para suplir la sangre que perdía por la hemorragia.
Mientras se realizaban estos procedimientos, la presión de la joven bajaba rápidamente. A las 21:20 tenía 83/42 y 10 minutos después, 80/40.
“Estaban afectados el corazón, el pulmón y el hígado. Si se le habría hecho antes la tomografía se habría podido reparar las heridas. Entró en shock”, explicó Donoso.
A las 21:55, Mazoyer ingresó al quirófano, pero el cirujano cardiotorácico (especialista) llegó a las 22:20. Ese momento la francesa tuvo un infarto, “causado por la anestesia”, pero fue superado con un masaje en el corazón. A las 22:45 tuvo otro ataque cardíaco que fue fulminante.
Por ahora el caso está en indagación previa y el Fiscal dispuso que se realicen varias diligencias.