La emisión de ceniza del volcán Taal, en Filipinas, hizo evacuar a los residentes de los municipios cercanos al coloso, este 12 de enero del 2020. Foto: AFP
Las autoridades filipinas advirtieron este domingo 12 de enero del 2020 que un volcán cercano a la capital Manila podría entrar en erupción de forma inminente, horas después de lanzar nubes de cenizas que obligaron a evacuar a miles de residentes y a suspender vuelos en la región.
Miles de personas que viven cerca del volcán Taal, una popular atracción turística ubicada en el centro de un pintoresco lago, fueron evacuadas de sus viviendas. La ceniza expulsada ha llegado a todos los barrios de Manila.
Una erupción del volcán, situado a 65 km al sur de Manila, podría producirse “en las próximas horas o días”, declaró a la AFP Renato Solidum, jefe del Instituto de vulcanología y sismología de Filipinas.
Las autoridades estiman que el volcán Taal podría erupcionar en las siguientes horas o días. Foto: AFP
El Instituto de Vulcanología y Sismología de Filipinas subió este domingo de manera escalonada la alerta del nivel 1 al 4 en una escala de 5 después de que se intensificara a lo largo del día la actividad en el cráter y se generara una erupción de humo de un kilómetro de altura.
Las autoridades pusieron en marcha la evacuación de los municipios de San Nicolás, Balete y Talisay, cercanos al volcán situado a 65 kilómetros al sur de Manila, confirmó a Efe el portavoz del Consejo Nacional de Reducción de Riesgo de Desastres, Mark Timbal.
Según datos de 2017, la población de estos tres municipios se situaría entre los 6 000 y los 10 000 habitantes. Personal de la Cruz Rojo de Filipinas se desplazó a la zona para ayudar con las labores de evacuación.
Las personas fueron evacuadas a centros seguros, tras la ceniza que cayó en el ambiente. Foto: AFP
El Departamento de Salud advirtió de que la exposición a la ceniza puede causar problemas de salud por lo que recomendó que los habitantes de las zonas afectadas eviten estar al aire libre y si lo hacen que usen mascarillas y gafas.
Miles de turistas visitan cada año al Taal y algunos realizan excursiones hasta su cráter, parcialmente inundado y en el que es fácil ver pequeñas fumarolas.
El volcán, que mató a 1 300 personas en 1911 y a 200 en 1965, forma parte de una cadena volcánica que se extiende por la región occidental de la isla de