Redacción Quito
El puente peatonal ubicado frente al Colegio Montúfar, en la av. Napo, en el sur, no se utiliza. Los estudiantes continúan cruzando por la calle y no respetan ni siquiera las luces del semáforo.
El puente fue edificado para salvaguardar la vida de los estudiantes y evitar accidentes de tránsito.
A las 07:00 y al mediodía existe gran cantidad de alumnos que ingresan y salen de clases. Pero varios de ellos prefieren cruzar la calle y no atravesar el puente.
Bryan Bonilla, estudiante del segundo año de bachillerato, aseguró que cruzar el puente le toma más tiempo que cruzar la calle. Subir las 45 gradas de la escalera, en sentido norte-sur, y bajar las 36 gradas que llevan hasta el colegio toma entre un minuto treinta y dos minutos. Mientras que cruzar la calle lleva menos de 1 minuto.
Dina María Taco, moradora del sector, dijo que los estudiantes nunca usarán el puente. “Ni siquiera el que está a menos de 100 metros de aquí usaban, peor este puente que hasta ya se cayó”.
Y es que la inseguridad es uno de los principales factores que mencionan los alumnos al momento de justificar el poco uso que le dan al puente.
A pesar de que el paso fue inaugurado a finales de septiembre, las gradas están trizadas y la estructura se mueve al cruzar.
Cinco cables de luz eléctrica están pegados a los pasamanos, las barandas no están sobre el nivel de la cintura y, según los estudiantes, esto es un peligro porque ellos se empujan mientras caminan.
Ayer, por primera vez, Dennis Villacrés subió al puente. Él aseguró que no lo volverá a usar ya que en los filos de la estructura se ven restos de espumaflex. “Parece que el puente se va a caer y me da miedo cruzar por ahí”.
Además de este puente, en el sector existen dos rompevelocidades y seis semáforos para los 453 buses que circulan por el lugar.
Pero esto no ha ayudado a disminuir el tráfico que se genera en horas pico, según Carlos Montero, vecino del sector. Montero dijo que algunos moradores del barrio rechazaban la creación de este puente, sin embargo, las autoridades del colegio, los padres de familia y los mismos estudiantes les expusieron las ventajas que traería la construcción del paso, entre esas estaba la disminución de los trancones. Según Montero, esto no ha sucedido.
Taco aseguró que los alumnos del Montúfar cruzan la calle incluso cuando el semáforo aún esta en verde para los carros. Para Taco, esta es una de las principales razones por las que se genera congestión en la av. Napo.
Durante tres minutos, más de 40 estudiantes cruzaron ayer por la calle, mientras que solo 11 lo hicieron por el puente. Entre ellos estuvo William Taco, quien aseguró que aunque el levantamiento del puente fue una buena solución y lo usa a diario a la hora de entrada y salida de clases, es necesario corregir los errores que tiene. William también pidió mayor control y alumbrado en la noche ya que, según dijo, los estudiantes de la sección nocturna que funciona en el establecimiento han sido asaltados al cruzar por ahí.
Datos del puente
La construcción de esta obra le representó a la ciudad una inversión de casi USD 95 000.
El 11 de julio, durante la primera edificación del paso, este puente se cayó y cinco personas quedaron heridas. La empresa Pate CA. estuvo a cargo del levantamiento del paso.
El puente mide 35 metros de largo y 4,65 metros de alto. A 100 metros se encuentra otro paso que tampoco es usado con frecuencia por los peatones.