Familiares y amigos de la víctima se concentraron a la afueras del hospital San Luis de Otavalo antes de que sea trasladado al Centro Forense de Esmeraldas. Foto: Washington Benalcázar/ EL COMERCIO.
Hoy, 17 de marzo del 2015, falleció en un confuso incidente un estudiante de una unidad educativa de Otavalo, provincia Imbabura, ubicada en el norte de Ecuador. La víctima, que tenía 16 años, fue trasladado al hospital San Luis de Otavalo, cerca de las 10:00, con una herida en la espalda. Sin embargo, murió en esa casa de salud.
La noticia se difundió rápidamente en la provincia. Al parecer, dos compañeros le habrían agredido en el interior del plantel con una arma blanca, durante una hora libre, pasadas las 09:00.
La madre del muchacho afectado, que labora en el bar de la institución educativa, se enteró del incidente y lo trasladó al hospital, a bordo de un vehículo particular.
La Policía detuvo a los dos supuestos responsables del ataque. Ellos también serían menores de edad y compañeros de la víctima en el primer año de bachillerato.
Un estudiante de la unidad educativa relató que se trataría de una rencilla que habría iniciado por una denuncia que realizó la víctima en torno a la supuesta venta de droga, al interior del plantel. También aseguró que el tema habría llegado a oídos de las autoridades de la institución educativa.
El Rector encargado del plantel y el Director Distrital de Otavalo prefirieron no pronunciarse sobre el tema. Entre tanto, tras el incidente las labores en la unidad educativa fueron suspendidas. La tarde de ayer, 16 de marzo del 2015, en la coordinación Zonal de Educación, que tiene a cargo las provincia fronterizas del norte de Ecuador, se informó que se espera un informe para conocer los detalles de este hecho.
Mientras tanto, los familiares y amigos del fallecido presenciaron el traslado del cadáver desde el hospital de Otavalo hasta la provincia de Esmeraldas, en donde funciona el Centro de Investigaciones de Ciencias Forenses, de la Fiscalía. Ahí se le practicará mañana el examen legal, para determinar exactamente las causas del deceso, por tratarse de una muerte violenta. Luego el cuerpo retornará a Otavalo para su velación y sepultura.
El estudiante fallecido era el último de tres hermanos. Su madre, quien lloraba desconsoladamente, se desmayó varias veces. Compañeros de la víctima, luciendo el uniforme del plantel, lamentaban el desenlace. También comentaban que ante las continuas amenazas de violencia muchos han optado por cambiarse de institución.
Este es el primer caso de una muerte violenta al interior de un plantel educativo de Imbabura durante este año lectivo.