La reforma fiscal constituye un importante triunfo para el presidente, Donald Trump. Foto: EFE
La mayoría republicana en el Senado de Estados Unidos aprobó en la madrugada de hoy, 20 de diciembre del 2017, la mayor reforma de impuestos en el país en décadas, lo que significa un importante triunfo para el presidente, Donald Trump.
La reforma, que debe ser nuevamante aprobada por la Cámara de Representantes antes de que el mandatario la pueda firmar.
¿Cuál es el aspecto principal de la reforma fiscal estadounidense?
El paquete incluye bajadas de impuestos por un volumen de casi 1,5 billones de dólares (1,27 billones de euros). Entre los puntos principales se encuentra una gran reducción de los impuestos a las empresas del 35 al 21 por ciento.
También la mayoría de los demás contribuyentes pagarán menos al fisco al menos temporalmente. Sin embargo, los más ricos se beneficiarán más de la medida de Trump que los pobres y la clase media, según las críticas de los opositores demócratas.
¿Cómo son los impuestos a las empresas estadounidenses en comparación con otros países?
Actualmente son notablemente más altos, pero con una reducción al 21 por ciento, la mayor economía del mundo estaría ligeramente por debajo de la media de la mayoría de los competidores (23 por ciento).
En la Unión Europea (UE) hay países que permiten a sus empresas pagar aún menos impuestos, entre ellos Reino Unido e Irlanda. Estados Unidos quedaría solo ligeramente por debajo de la media de la UE, que es de poco más del 22 por ciento.
¿La reforma supone algún riesgo para Estados Unidos?
Los riesgos son importantes. El endeudamiento ya de por sí enorme será aún mayor debido a las grandes deducciones fiscales a empresas y el déficit resultante en los ingresos del Estado.
Los críticos señalan que las futuras generaciones de contribuyentes pagarán las consecuencias. La actual presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, expresó recientemente su preocupación.
Según ella, la economía estadounidense, ya de por sí a toda máquina, corre el riesgo de sobrecalentarse a largo plazo. Los incentivos podrían fracasar porque las empresas podrían decidir invertir en otros países en lugar de en la madura economía nacional.
Por eso muchos economistas consideran que la reforma fiscal, que Trump está tratando de sacar adelante por motivos políticos, llega “a deshora”.
¿Qué opinan los Gobiernos europeos de la reforma?
Advierten de una distorsión de la competencia en el comercio con Estados Unidos. Los ministros de Finanzas de España, Alemania, Francia, Reino Unido e Italia advirtieron en una carta a su homólogo estadounidense de la discriminación a las empresas extranjeras.
Los ministros temen sobre todo una propuesta de gravar con el 20 por ciento los pagos a filiales fuera de Estados Unidos, una especie de impuesto especial. Se trata de una regulación denominada “excise tax” que exigió la Cámara de Representantes.
Esta afectaría por ejemplo a las empresas automotrices con centros de producción en Estados Unidos porque importan muchas de las piezas de montaje. De momento no se sabe si esta medida, que supondría un gravamen doble, se encuentra en el proyecto de casi 500 páginas.