Este uno de los incendios menores registrado el lunes 23 de noviembre del 2020 en el sector El Cabezón, en el sistema de puentes al ingreso a la ciudad de Esmeraldas. Foto: Marcel Bonilla / EL COMERCIO
Los representantes del Cuerpo de Bomberos de Esmeraldas empezaron una campaña de concienciación entre los ciudadanos, debido a los incendios forestales que se han registrado en los últimos cinco meses.
Entre junio y noviembre del 2020 se han producido 23 siniestros. En algunas de las emergencias se ha tenido que contar con las unidades de bomberos de la Refinería de Esmeraldas.
Cerca de la terminal petrolera de Balao se produjo un incendio forestal que consumió 10 hectáreas de pajonales; en junio otras 10 hectáreas se quemaron en el barrio El Regocijo, parte alta de la ciudad de Esmeraldas.
En el barrio Chone, en el norte de la ciudad, se destruyeron 30 hectáreas que pusieron en alerta los habitantes del sector por las llamas y la contaminación. Los vecinos tuvieron que limpiar sus casas por el hollín que ingresó a sus domicilios.
En La Tolita 1, en el sur, también se consumieron 15 hectáreas. Las emergencias se presentaron entre julio y agosto. En ese periodo hubo otras, pero de menor magnitud.
La quema de las últimas dos hectáreas ocurrió el 23 de noviembre en el sector La Guacharaca, cerca de las antenas de radio y televisión de medios de comunicación locales y nacionales.
De los 23 reportes aún no se ha identificado a los responsables; por eso, a través de la campaña se ha pedido a los habitantes que entreguen información para iniciar los procesos legales.
El comandante del Cuerpo de Bomberos de Esmeraldas, Miguel Perea, dijo que la campaña se articula con la Dirección de Ambiente del Municipio de Esmeraldas y los representantes del ECU-911.
“Debemos hacer conciencia a la hora de quemar los pajonales, puesto que puede ponerse en riesgo el oleoducto que cruza por la parte alta hasta puerto Balao, donde hubo incendios”, señaló Perea.
A través de la Dirección de Ambiente se realizan las inspecciones para levantar un nuevo informe y tomar acciones legales.
Entre los bomberos existe preocupación porque desde 1998 no se cuenta con nuevas unidades contraincendios, así como equipos especiales para atender esas emergencias en caso de ser mayores.