El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper, finalizó este martes, 31 de enero del 2017, dos años y medio de labor en ese cargo. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
El secretario general de Unasur, Ernesto Samper, pronunció su informe final de rendición de cuentas la mañana del martes 31 de enero del 2017. Ahí recordó la posición política que mantuvo el bloque frente a enfrentamientos políticos y armados al interior de los países miembros. En el transcurso de esta semana regresará a Colombia. Quiere pasar más tiempo con sus nietos. La Unasur deberá escoger a su sucesor.
Samper asumió la Secretaría General en septiembre del 2014. Tras casi dos años y medio hizo un resumen de sus actividades frente a invitados especiales y cancilleres de los países miembros del bloque regional. El acto se dio en la sede del organismo en el norte de Quito.
El diplomático dividió su intervención en temas políticos, económicos y sociales. En el primer caso, señaló que el bloque colaboró en la construcción de los acuerdos de Paz entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno colombiano. También respaldó el proceso que se inició con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en ese país.
En Venezuela, Samper añadió que se buscó un proceso de diálogo para reconciliar “las fuerzas políticas, establecer una comisión de la verdad, solucionar el problema de los detenidos, preservar el equilibrio de poderes”, entre otras acciones puntuales.
También llamó al oficialismo y oposición a “reconocerse” entre sí para respetar sus posiciones. Pidió al Gobierno venezolano el pleno reconocimiento a la Asamblea Nacional que ostenta mayoría opositora. En cambio, pidió al Legislativo que reconozca “el legítimo derecho del Presidente a gobernar hasta que termine su periodo”.
Durante su gestión se registró el ‘impeachment’ contra la presidenta de Brasil, Dilma Roussef. Los países miembros tuvieron sus posiciones a favor y en conta del fallo que removió a la Mandataria. El bloque no tuvo una posición conjunta. “Durante la etapa de juicio a la presidenta, la Secretaría expresó su preocupación por el respeto a su debido proceso”, dijo.
En el caso social, lamentó que 10 millones de personas que ya habían salido de la pobreza, hayan regresado a este estado en los dos últimos años, según un informe de la Cepal.
En la última etapa en su cargo, el expresidente colombiano trabajó para impulsar la nacionalidad sudamericana. Este proyecto, que no está implementado, ya cuenta con una hoja de ruta para tener un documento único que permita la movilización o estudio y, en otra etapa, el derecho al trabajo, de los ciudadanos en los diferentes países.
También se atribuye “logros” como el Banco de Precios de Medicamentos, el Manual de Manejo y Gestión de Riesgos Naturales de Unasur, la agenda de proyectos de infraestructura regional (se contempla la viabilidad de un tren transatlántico), el impulso a la política alternativa de lucha contra las drogas, entre otros.
Samper pidió mayor unidad del bloque para enfrentar el nuevo escenario político que tiene como protagonista al nuevo presidente estadounidense Donald Trump. Tildó como “muro de la ignominia” la propuesta de dividir con una barrera la frontera entre Estados Unidos y México.