Pekín, DPA
Dos enviados especiales del líder espiritual del Tíbet, el Dalai Lama, llegaron hoy a China para reanudar las conversaciones, interrumpidas desde hace 15 meses, sobre el futuro de esa región del Himalaya.
“Esperamos que el Dalai Lama aprecie la oportunidad y que responda positivamente a las peticiones del gobierno central”, dijo a los periodistas el portavoz del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, aunque no aportó más detalles acerca de dónde se celebró el encuentro ni sobre la agenda de los dos visitantes tibetanos en Pekín.
Activistas en favor del Tíbet se mostraron escépticos acerca de los resultados de las reuniones. La más reciente “retórica sin compromisos” del jefe de Estado y líder comunista chino Hu Jintao y un “significativo endurecimiento de la política hacia el Tíbet” pusieron en tela de juicio la seriedad de las intenciones del gobierno chino, comentó la directora de la organización “Free Tibet”, Stephanie Brigden en un comunicado.
Durante la última ronda de diálogo, celebrada en noviembre de 2008, el gobierno chino había rechazado rotundamente las demandas de autonomía para el pueblo tibetano y criticado mordazmente al Dalai Lama. La reanudación del diálogo se produce sobre el trasfondo de cambios en la dirección política en Lhasa (capital del Tibet) y la presentación de un plan del gobierno chino para el desarrollo económico de la región.
El Departamento de Estado norteamericano saludó el acuerdo de reanudar las conversaciones y expresó la esperanza de que la nueva reunión “arroje resultados positivos y cree la base para futuras discusiones para resolver asuntos pendientes”.
Por su parte la organización International Campaign for Tibet (ICT) vio en el nuevo plan de desarrollo para el Tíbet un posible nuevo interés de Pekín de resolver los problemas. “Esperamos que esta vez haya muestras de que el lado chino está dispuesto a entablar un diálogo dirigido a obtener resultados”, señaló la presidenta de ICT, Mary Beth Markey, en un comunicado de Londres.
La nueva ronda de diálogo es la novena desde 2002 y previsiblemente se prolongará durante varios días. El gobierno comunista chino acusa al Dalai Lama de buscar la separación del Tíbet. Recientemente han tenido lugar cambios relevantes en la cúpula política tibetana.
A mediados de enero Padma Choling sustituyó al hasta entonces jefe de gobierno Qiangba Puncog. El nuevo mandatario, de 62 años, es uno de los pocos tibetanos que tiene formación militar, tras haber servido 17 años en el Ejército Popular chino. Padma Choling comenzó su carrera en el gobierno tibetano en 1986 y ascendió en 2003 a vicegobernador de la región autónoma del Tibet.