Las terminales de transporte público en Quito experimentarán una importante renovación, con el objetivo de mejorar la experiencia de los usuarios y optimizar la infraestructura.
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Desde el 5 de septiembre de 2024, el Municipio de Quito inició los trabajos en las terminales de La Marín, Ofelia y Río Coca, con una inversión de 385 450 mil dólares y un plazo de 90 días para la ejecución de las obras.
Mejoras en La Marín: seguridad y modernización
En La Marín, ubicada en el centro de la ciudad, las obras incluyen el reemplazo del policarbonato en la cubierta de los andenes, garantizando mayor durabilidad. Además, se construirán 23 kioscos nuevos para confiterías y se renovarán las baterías sanitarias.
También se anunció que se instalarán sistemas de automatización para hacer más eficiente el servicio en el futuro.
Ofelia: accesibilidad para todos los usuarios
En la terminal de Ofelia, al norte de Quito, se priorizarán mejoras para personas con movilidad reducida. Se construirá una batería sanitaria adaptada a sus necesidades, se reparará el cerramiento y se dará mantenimiento a la fachada.
Estas mejoras están diseñadas para asegurar que todos los ciudadanos puedan acceder cómodamente a las instalaciones.
Río Coca: más espacio para el flujo peatonal
En la terminal de Río Coca, también en el norte de Quito, se ampliará su acera interna para facilitar el tránsito peatonal. Adicionalmente, se llevará a cabo el mantenimiento de la fachada y la construcción de un cuarto para el generador eléctrico, lo que garantizará una operación continua, incluso en situaciones de emergencia.
Impacto positivo
Las obras se realizarán durante el día, sin interrumpir el servicio regular de transporte hacia las parroquias rurales del Distrito Metropolitano. De esta manera, se busca minimizar las molestias para los usuarios, quienes continuarán utilizando las terminales durante el proceso de renovación.