70% de empresas suspendió la jornada presencial. Otros laboran con limitaciones. Foto: Cortesía CEE
La paralización del 70% del sector productivo genera pérdidas diarias de USD 350 millones y eso está dejando sin oxígeno financiero a las empresas.
Ese es el primer balance del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), que representa a unos 100 gremios del país. El grupo hizo una propuesta, que fue enviada al presidente de la República Lenín Moreno.
Juan Sebastián Roldán, secretario de Gabinete de la Presidencia, informó ayer que trabaja con sectores productivos para delinear la iniciativa de reforma económica y laboral que será presentada en estos días. La propuesta buscará dar alivio a todos los actores de la cadena, desde los más pequeños hasta los más grandes, dijo.
La CEE espera que la propuesta de los empresarios sea considerada en ese análisis.
Caterina Costa, titular de la CEE, explicó que esa iniciativa tiene un costo de cuatro puntos del PIB (USD 4 000 millones). De ese monto, 84% es por medidas destinadas a cuidar la liquidez de las compañías y, el resto, a la reactivación luego de la emergencia sanitaria.
Costa destacó, además, que 77% del dinero es recuperable por parte del Estado, pues solo se trata de diferir obligaciones con el Servicio de Rentas Internas, el Seguro o Aduana.
El plan incluye facilidades para el sector exportador como la devolución de impuestos por un valor equivalente al 3% sobre el monto enviado al exterior (llamado drawback).
Los sectores más afectados son los de flores y cacao, pero los problemas de logística que provocó la pandemia se sintieron en todas las áreas. Por eso, solicitan que la medida se aplique desde enero pasado.
El Gobierno resolvió hace una semana diferir el pago del impuesto a la renta e IVA para cuatro sectores: exportadores, firmas de Galápagos, turismo y microempresas. Pero la CEE pide que esto se amplíe a todos los sectores y se incluya al impuesto a la salida de divisas.
Otra inquietud es el pago de aportes al Seguro que se debe hacer hasta el 15 de este mes.
Este Diario conoció que ese ente aprobó una resolución para que no exista mora patronal para los empleadores que se atrasen en la emergencia. El texto aún no ha sido firmado.
De los USD 4 000 millones que cuesta el plan propuesto por las empresas, un 23% del monto contempla sacrificio fiscal que no podrá recuperar el Estado, pero que ayudará a impulsar la reactivación luego de la crisis, argumentó Costa. En este punto se plantea, por ejemplo, eliminar aranceles para todos los bienes e insumos para la industria.
La Presidenta de la CEE dijo que el sector productivo conoce las dificultades de la caja fiscal, pero consideró que se podría destinar una parte de los USD 2 000 millones en desembolsos de multilaterales que se esperan para abril al plan propuesto por los empresarios.
“Si no se da oxígeno a las empresas, estas tampoco podrán tributar y el Fisco no recibirá ingresos”, precisó.
El exministro de Finanzas, Mauricio Pozo, comentó que los planteamientos del gremio van en la línea de medidas aplicadas por otros Gobiernos de la región. Pero, a diferencia de ellos, Ecuador no tiene liquidez. Por eso, sugirió reducir la jornada laboral en el Estado Eso generará USD 2 500 millones en liquidez para el Fisco.
A muchas pequeñas y medianas firmas (pymes) del sector textil les queda menos de 37 días de liquidez disponible. La falta de ingresos preocupa, ya que no hay certeza de que las actividades se retomen el 12 de abril, dijo Juan Francisco Costa, vicepresidente del área textil de la Capeipi.
Por la emergencia, el 95% de ese sector está parado.
Juan Costa también es subgerente de la textilera La Esperanza Comercializadora, que elabora ropa infantil. Debido al estado de excepción, la firma suspendió operaciones y ahora se alista para incursionar en el área de insumos médicos como estrategia para reactivar el trabajo en la industria.
La compañía pidió al Gobierno priorizar la compra pública a productores del país.
Un estudio de la Universidad de las Américas (UDLA) muestra que 50% de empresas locales resistirá en promedio solo 37 días, o incluso menos, en un escenario extremo de escasez absoluta de ingresos. En la rama de alojamiento y servicio de comidas son 31 días, en agricultura 32, en construcción 34, manufactura 35, etc.
EL COMERCIO
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