En almacenes Estuardo Sánchez (Quito) se registró un incremento de importaciones. Foto: Armando Prado/EL COMERCIO
La importación de los bienes que estaban gravados con salvaguardias aumentó desde que finalizó la medida.
En marzo del 2015 se aplicaron sobretasas de entre 5 y 45% a 2 961 partidas. Y entre enero de 2016 a junio de este año, el mecanismo se levantó poco a poco, hasta llegar a cero.
Con ello llegaron dos efectos: se abarataron las importaciones y se redujeron los precios de venta al público de esos productos. Entre estos se encuentran licores, electrodomésticos, artículos para el hogar, comida, ropa, calzado, etc.
Según un informe de Aduana, entre junio y agosto de este año frente al mismo período del 2016 las compras desde el exterior, de bienes que estuvieron gravados con salvaguardias, crecieron en un 35%.
En los almacenes Estuardo Sánchez, una importadora de artículos para el hogar, juguetes, electrodomésticos y otros productos, las adquisiciones del exterior crecieron en igual proporción en esos tres meses.
Entre los productos que ha importado están artículos del hogar, cristalería, juguetes, cubiertos, entre otros. Asimismo, inició la compra de árboles de Navidad, decoración y luces.
Juan Javier Sánchez, gerente y propietario de este negocio, indicó que importa estos últimos elementos con anticipación, por la incertidumbre de que pueda aplicarse otra medida restrictiva más adelante.
A fines de junio, el ministro de Comercio Exterior, Pablo Campana, señaló que se analizaba el incremento de hasta en cinco puntos del arancel a 400 productos importados, principalmente bienes de consumo.
Las últimas cifras del Banco Central del Ecuador (BCE), del primer semestre, muestran que las importaciones totales de bienes de consumo de junio de este año frente al del 2016 crecieron casi en 77%. Es decir, estas se encuentran entre las que más crecieron.
Ropa y calzado del extranjero ingresa en mayores volúmenes, incluso pese a los requerimientos técnicos para su importación. La compra de zapatos chinos marca West, por ejemplo, creció 15% en los últimos tres meses frente al mismo período del año anterior.
Según los importadores, si no hubiera demanda no se trajeran productos. Desde la Aduana se indicó ayer que el aumento de compras desde el exterior es un signo de recuperación de la economía y de la reactivación del consumo.
Los licores están entre los productos más apetecidos, principalmente los provenientes de la Unión Europea. A estos se les retiraron los aranceles, como consecuencia del acuerdo comercial, y se beneficiaron del levantamiento de sobretasas arancelarias.
Según Felipe Cordovez, presidente de la Asociación de Importadores de Licores, todo esto llevó a que los precios bajen. En el caso del whisky se redujo en más del 50%.
La venta y la importación de licores se multiplicó hasta cuatro veces en comparación con la época en la que se aplicaron sobretasas y aranceles. En los vinos chilenos y argentinos la venta subió 8%, con precios que cayeron hasta 20%.
No obstante, no todo luce bien para los importadores. Sánchez, por ejemplo, asegura que todavía tiene ‘stock’ que compró con sobretasas, el cual tendrá que venderlo a pérdida.
Ahora los precios son más bajos y es imposible, dijo, que esa mercadería que fue más costosa de importar salga sin realizar descuentos, promociones, ofertas, entre otros.
Para Mario Aguirre, presidente de la Asociación de Importadores de Calzado, esta no es una época comercial y no ha sido necesario, por ahora, un aumento de las importaciones. Él considera que esto pudiera evidenciarse para el cuarto trimestre, cuando se adquieran productos para Navidad.
Además, cree que la economía todavía no se ha reactivado realmente. Su ritmo de importaciones, provenientes de Brasil y Asia, se mantiene.
En almacenes Montero, que ofrece productos de belleza y electrodomésticos, afirman que el poder de compra es bajo. Aquí, la rotación de productos y el abastecimiento se repone con mercadería importada.