Redacción Guayaquil
Uno de cada seis adultos planea levantar un nuevo negocio o ya ha administrado uno en los últimos 42 meses.
Ese fue el resultado del índice de la Actividad Emprendedora Temprana (TEA) en Ecuador, durante 2008, y que se ubicó en el 17,18%. En 2004, el indicador fue del 27,24%, pero no la base de la información fue diferente, por lo que no es comparable.
Un estudio global
El análisis de emprendimiento implicó realizar encuestas en 43 países. La muestra en Ecuador fue de 2 142 personas, mientras en Colombia fue de 2 000.
Cerca del 50% de los emprendedores requieren invertir hasta USD 2 500 para iniciar su negocio. Un 13,8% requiere más de USD 7 000. Una parte de los fondos que se utilizan son propios y el resto de otras fuentes.
En Ecuador el 46% de las personas encuestadas utiliza exclusivamente recursos propios y esperan recuperar, en su mayoría, el doble y hasta cinco veces su inversión inicial.
El TEA mide la dinámica del emprendimiento en personas de 18 y 64 años de edad. Permite identificar las características de los individuos que crean empresas e incluye las intenciones reales y los primeros pasos para iniciar un negocio.
El informe sobre el emprendimiento en Ecuador fue presentado la noche del viernes pasado por la Escuela de Posgrado en Administración de Empresas de la Espol. También se realizaron conferencias sobre el emprendimiento en América Latina y el impacto que tiene en el desarrollo económico de los países.
Al evento asistieron más de 50 personas que buscaban información sobre los nuevos negocios.
Ernesto Amorós, de la Universidad del Desarrollo de Chile, dijo que la tendencia de los nuevos negocios en Latinoamérica se concentra en servicios a los consumidores (como comida, comercio, peluquería y demás) y en la transformación de productos con valor agregado. “Hay un potencial muy grande, pero también hay limitaciones. No se incorpora mucha tecnología moderna y se exporta muy poco”.
Virginia Lasio, directora de la Espae, contó que la mayoría de la actividad emprendedora se realiza por necesidad antes que por oportunidad, que ayuda a mejorar la calidad de vida. Por esa situación el índice es bajo para Ecuador, debido a que los emprendimientos por necesidad no general crecimiento y empleo.
Según Guido Caicedo, investigador de la Espol, el 42% de los emprendimientos corresponden a empresas nuevas y el 58% de negocios que tienen uno o dos años. Además, el 50% de los encuestados apuesta al emprendimiento para mejorar sus ingresos. Otros lo hacen para lograr una independencia económica o para mantener sus ingresos actuales.
Para Amorós, los emprendedores en el país tienen limitaciones de diferente índole, como afrontar los conflictos políticos, la incertidumbre, la fuga de cerebros, la reducida inversión en investigación y desarrollo, etc.