Bogotá. ANSA
Los militares de Estados Unidos operarán en Colombia desde tres bases de la Fuerza Aérea, en el marco de un acuerdo de cooperación técnica que estudian los dos países tras el cierre de la Base de Manta en Ecuador.
Así lo explicó ayer el ministro de Defensa de Colombia (e), general Freddy Padilla, en una audiencia pública en Bogotá, transmitida por TV y a la que acudieron el canciller Jaime Bermúdez y el ministro del Interior, Fabio Valencia. Medios de prensa locales afirmaron hace poco que Bogotá y Washington negociaban el traslado de las operaciones militares de Manta, que concluirán en noviembre, a cinco unidades de la Fuerza Aérea y la Marina.
Padilla manifestó que el acuerdo contempla las bases de aéreas de Palanquero, en el centro del país; Alberto Pouwels de Malambo, en el norte, y de Apiay, en el departamento del Meta, a unos 150 km al sur de Bogotá.
Además dijo que Bogotá ofreció a Washington otras dos bases para las operaciones: la de Tolemaida, el mayor centro de entrenamiento militar en el centro del país, y la de Larandia, en el Caquetá, al sur.
“En este acuerdo no se está entregando la soberanía ni poniendo en tela de juicio la autonomía de nuestro país”, afirmó por su parte el ministro Valencia.
El Canciller aseguró que el convenio “es exclusivamente para Colombia” y no tiene por qué “afectar a las relación con los países vecinos”. El acuerdo de asistencia militar estadounidense duraría 10 años, con posibilidades de extenderse, e incluiría la permanencia de 800 militares y 600 contratistas estadounidenses que, según explicaron los funcionarios, cumplirían funciones de adiestramiento y apoyo técnico.
“No son tropas de combate”, insistió Valencia, y el Canciller reiteró que no se trata de una base estadounidense en el país, como ocurre en Manta.