La creación de páginas web es una tendencia entre los centros educativos privados de Cuenca. Y estos espacios se vuelven un aliado clave de los padres para controlar el desarrollo académico de sus hijos. Allí, se publican calificaciones, inasistencia, tareas, avisos…
Las unidades educativas María Auxiliadora, Sudamericano, Rafael Borja, Rosa de Cordero y otros aplican modelos pedagógicos digitales. En Cuenca hay 179 planteles particulares y religiosos, de estos más de la mitad tiene esas plataformas, según la Dirección de Educación de Azuay.
El Sudamericano, por ejemplo, forma a 680 niños y jóvenes. El 40% es hijo de emigrantes. “En principio, optaron por la plataforma informática para llegar a los padres ausentes que estaban interesados por el rendimiento de sus hijos”, cuenta la coordinadora académica, Sandra Jara.
Ahora está pensado para todos. En la matrícula, el padre recibe una clave para ingresar a la cuenta y verificar notas, tareas diarias y llamados de atención. También disponen de correos electrónicos.
Glenda Puente tiene 12 años y su padre vive en EE.UU. desde hace una década. Su madre es la representante, pero su progenitor siempre está pendiente de su rendimiento académico a través de la página web. “Cuando bajo en notas me llama la atención”.
El cuencano Luis Arteaga matriculó a sus tres hijas, de 13, 15 y 16 años, en el Sudamericano. A diario recibe notificaciones sobre tareas y actividades. Los alumnos también están conectados porque deben enviar tareas por e-mail, aportar en foros o subir trabajos al portal.
La Unidad Educativa Salesiana María Auxiliadora tiene una plataforma parecida. Los contenidos y tareas de las materias de pastoral, inglés, matemáticas, lenguaje y computación se suben al portal.
Según la vicerrectora, Jackeline Aguilar, al principio fue difícil porque no todos los 954 representantes utilizaban las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación). Por eso, mantenían las notificaciones diarias a través de correo electrónico y las esquelas.
Este año lectivo, solo las alumnas de prebásica y primero de básica mantienen ese doble sistema. “Los padres se adaptan”.
La madre de familia, María Paz Arteaga, tiene a dos niñas en este plantel. Para ella, lo más útil es estar informada sobre las calificaciones. “Si está mal en alguna materia, puedo incentivarla a que estudie para mejorar”.
El pasado lunes, el Colegio Técnico Salesiano de Cuenca cambió su plataforma informática por una más completa. Es un nuevo modelo pedagógico digital que busca mejorar la comunicación e interacción entre las autoridades, docentes, alumnos y padres.
“El sistema tiene los datos de los 3 000 alumnos y profesores. Además, los contenidos de las materias, actividades, programaciones, horarios…”, dice el padre, Juan Cárdenas, presidente de Consejo Nacional de Educación Salesiana.
Es un proyecto piloto que se aplicará en los 30 centros de esta comunidad en todo el país.
Desde el 2014, el representante recibirá, 30 minutos después de finalizada la clase, información si su representado faltó a clases, cometió una falta grave o no presentó las tareas. Será por mensajes de texto.
Otro tipo de servicios
En los sitios web, los centros educativos también se exhiben imágenes de las actividades culturales, deportivas y cívicas cumplidas con sus alumnos.
Otros datos son información sobre cómo está estructurado el plantel, oferta educativa, políticas, autoridades, becas…
Estos colegios cada año ajuntan nuevas herramientas como chat y envío de mensajes dentro de sus portales.