La prohibición de consumir, capturar y comercializar cangrejos culmina a la medianoche de hoy. Dichas actividades serán permitidas pasadas esa hora en todo el país.
La restricción se inició el 15 de agosto pasado para proteger a las especies Ucides occidentalis (cangrejo rojo) y Cardisoma crassum (cangrejo azul), y también para precautelar el bienestar de quienes ingieran este alimento.
En septiembre los crustáceos entraron en la segunda muda o cambio de caparazón, por lo que generan altas concentraciones de oxalato de calcio, elemento perjudicial para la salud. La primera fue en febrero.
Los controles fueron dirigidos por los inspectores de pesca, apoyados por miembros de la Policía de Medio Ambiente y de la Armada del Ecuador.
Según la Dirección de Control Pesquero, hasta el 3 de septiembre se han decomisado 383 unidades de cangrejo, de las cuales 40 fueron devueltas a su hábitat y 13 incineradas.
También se logró detener la comercialización de 21 libras de carne de cangrejo, así como se incautaron 300 trampas que estaban listas para ser utilizadas en la captura del crustáceo.
Este es el resultado de operativos realizados en Huaquillas, Puná, Manta, Esmeraldas, Bahía de Caráquez, Quito, San Lorenzo del Pailón y Puerto Daniel López.
Los restaurantes especializados en preparar cangrejos se alistan para incluir en sus menús este platillo delicioso.
Durante su restricción, la oferta se basaba en comida con base en jaibas, camarones y langostinos. Estos productos fueron reemplazados en el muelle de acceso al mercado de mariscos Caraguay, en el sur de Guayaquil.