El sector turístico del país ha perdido 55 000 empleos directos producto de la crisis derivada del covid-19.
El 30% de los negocios formales cerró o cambió de actividad, según la Federación Nacional de Cámaras Provinciales de Turismo (Fenacaptur). Y la industria dejó de percibir, solo en un año calendario, cerca de USD 2 000 millones.
En ese escenario, miembros de la empresa privada, sector público y la academia trabajan en la redacción de una nueva Ley Orgánica de Turismo.
El ministro del ramo, Niels Olsen, anunció a fines de junio la integración de un equipo que trabaja ad honorem en “un proceso inclusivo y participativo” con el fin de plantear un proyecto innovador que contrarreste los “terribles rezagos” de la pandemia en la industria. El Ministerio habilitó esta semana el portal encuentro.turismo.gob.ec para que la ciudadanía deje sus aportes.
La comisión ciudadana a cargo del proyecto tiene un plazo de 90 días para redactar el proyecto de ley. El Ministerio informó a este Diario que a inicios de octubre se espera contar con un borrador final para que sea revisado por el Ejecutivo. Se prevé enviarlo a la Asamblea en noviembre.
Una semana antes de la conformación de la comisión, el Comité Juntos por la Reactivación del Turismo del Gran Guayaquil y la Empresa Pública Municipal de Turismo ciudad entregaron al Ministro propuestas de ley de reactivación económica urgente.
Entre los principales puntos está exonerar el impuesto a la renta hasta el 2024 para los contribuyentes del sector turístico; eso representa el 25% de los ingresos gravables.
Se plantea una amnistía fiscal para la repatriación de capitales, con el fin de invertirlos en turismo. Como una estrategia para incentivar el turismo nacional se planteó reducir el IVA para servicios turísticos.
Iván López, abogado especializado en turismo y uno de los ocho miembros de la comisión que redacta la Ley, indicó que las propuestas presentadas en Guayaquil están entre los insumos principales sobre los que trabaja el equipo.
Pero se siguen recibiendo iniciativas de forma individual y colectiva de diferentes sectores. “El cometido es recoger opiniones para tratar de redactar un documento que tenga el sentir de la mayoría”, dijo.
Los pedidos generalizados, sobre la disponibilidad de crédito a bajo costo, corresponden a otras instancias, según López. La Ley vigente de turismo, que data de 2002, tomó dos años para su aprobación y la necesidad de financiamiento es urgente, opinó.
Tampoco son materia de la ley -según el comisionado- los acuerdos de doble tributación con países como Estados Unidos, un plan para evitar que inversionistas extranjeros lleguen a pagar dos veces un impuesto, pues “son convenios que se firman entre países”.
El Comité por la Reactivación pide, no obstante, contemplar la creación de una línea de crédito a largo plazo a través de la banca de desarrollo. “El problema es de liquidez, se requieren precios especiales de energía eléctrica para el sector turístico”, dice Holbach Muñetón, miembro del Comité por la Reactivación del Turismo de Guayaquil y presidente de la Cámara de Turismo del Guayas.
El también presidente de la Fenacaptur dice que la falta de medidas urgentes pone en riesgo 400 000 plazas de trabajo. “Si queremos salvar el sector tienen que existir incentivos tributarios, con cero aranceles para los bienes de capital y disminución del IVA para alentar el turismo interno”, agregó Muñetón.
Gloria Gallardo, presidenta de la Empresa Pública Municipal de Turismo de Guayaquil, aboga por incluir el turismo de reuniones en la Ley y generar beneficios para su cadena de valor (alimentación, hotelería, transporte aéreo y terrestre, organizadores de eventos…).
Solicitó inversión en ferias y promoción de destinos como Guayaquil, Quito, Cuenca y Manta para la captación de congresos internacionales a través del Ministerio.
El turista de congresos y reuniones gasta de seis a ocho veces más que el de ocio. El gasto promedio por participante por día es de hasta USD 486 en eventos latinoamericanos, según la International Congress Convention Association.
En ese marco se plantean mesas técnicas para analizar la viabilidad legal y financiera para bajar o eximir el IVA al segmento de reuniones, congresos y exposiciones.
En el Ministerio buscan contar con un cuerpo legal que ofrezca mecanismos de mejoramiento de los servicios turísticos, desarrollo de destinos y productos, conectividad, fomento productivo, inversión y promoción turística, adelantó esa Cartera de Estado.