22 familias resultaron afectadas por el desbordamiento del río San Antonio en el cantón Bucay, en Guayas. Foto: Cortesía ECU 911
Arrasó con casas y plantaciones de cacao. El río San Antonio se desbordó este fin de semana en el cantón Bucay, en Guayas. En total, 22 familias resultaron afectadas en la localidad Matilde Ester, asentadas a orillas del caudal.
El alcalde José Miranda explicó que activaron un operativo para ayudar a los afectados. Con el aporte del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) entregaron vituallas y colchones a los damnificados. Seis familias fueron trasladadas a casas acogientes.
“En el 2015 también se desbordó y causó estragos. Hoy ha sido bastante agresivo, arrastrando lo que encontraba a su paso, inclusive animales domésticos y casas destruidas”, indicó Miranda.
En el sector Changuil la fuerza de la corriente destrozó cuatro viviendas.
La lluvia continua que soporta este cantón guayasense también generó problemas en el sector montañoso Altos de Bucay. En la vía a Chillanes, las precipitaciones causaron un accidente de tránsito en el sector Torre Loma. Un vehículo perdió pista; hubo un fallecido y dos heridos que fueron rescatados por personal del Cuerpo de Bomberos y de la Policía Nacional.
Bucay continúa en emergencia desde que el pasado 22 de febrero, cuando el deslizamiento de una montaña acabó con la vida de cinco personas. Ocurrió en la calle Paquisha, un sector comercial del centro del cantón, donde delimitaron 120 metros lineales en alerta roja.
Con cada lluvia, la ladera sigue cediendo. Este domingo, 19 de marzo, parte de calle quedó cubierta por lodo.
“Hemos emitido informes a cada uno de los habitantes, poniendo de manifiesto la situación de riesgo”, indicó Miranda. En esta zona habitan unas 35 familias, que además tienen sus negocios.
El desbordamiento de ríos también afecta al cantón Jujan. En el recinto La Otilia, el caudal de Los Amarillos generó problemas durante las primeras semanas de la estación lluviosa.
Aquí, personal de la Prefectura del Guayas reforzó las bases del puente que conecta con esta localidad y afianzó un muro de contención para evitar afectaciones a más de 6 000 hectáreas de cultivos de los recintos Jobito, La Olga, Malbar, Unión de los Ramos, La Providencia, La Moraima, Las Pastora y San Antonio.