Tras 11 meses de remozamiento, el puente Luis A. Martínez funciona otra vez . Por este paso, que conecta a los tradicionales barrios Ficoa y Atocha con el centro de Ambato, circulan desde el pasado miércoles 14 360 vehículos al día, según la Unidad Municipal de Tránsito del Municipio.
Además, lo utilizan 5 000 peatones. La restauración le costó al Cabildo USD 870 000.
Esto involucró la remodelación de las escalinatas aledañas. Asimismo, el mejoramiento en la iluminación del puente, ubicación de semáforos y reubicación del monumento a Luis A. Martínez.
También se cubrieron las fisuras, se cambiaron las instalaciones eléctricas y de alcantarillado. Las veredas se ensancharon a 1,90 metros y la calzada a 7,20m. Está previsto que con los arreglos se amplíe su vida útil a 20 años. El puente tiene 172 metros de largo y se estima que en el 2023, 27 600 carros transitarán por él al igual que 6 931 peatones.
“Ya era hora de que empezara a funcionar. El caos vehicular era terrible. Ahora, con los semáforos y la señalización el tráfico mejoró notablemente”, dijo Arturo Rodríguez, comerciante quiteño.
La restauración de este puente tradicional sobre el río Ambato incluyó también el reforzamiento de las vigas con fibras de carbono. “Los cambios en las aceras servirán para proteger al peatón”, señaló Mariana Buenaventura, directora de Obras Públicas.
Este puente es utilizado los fines de semana, especialmente, por cientos de turistas quiteños quienes se trasladan por este medio hacia Baños de Agua Santa, la zona comercial alta y Riobamba.
Según el director (e) de la Unidad Municipal de Transporte de Ambato, Marcelo Acurio, el tránsito por esa zona se complica de 07:00 a 08:30, 12:00 a 15:00 y 17:30 a 19:30.
Un estudio de esta oficina indica que al centro ingresan de 07:00 a 08:30, 4 413 autos en los cuales se movilizan 16 003 personas. De 12:00 a 15:00 hay 3 950 carros que transportan a 14 957 usuarios. “Con la apertura de este puente se aliviará el tránsito”, comentó Acurio.