Hace dos años y un mes que Santo Domingo de los Tsáchilas fue declarada como provincia. No obstante, hasta la fecha no se ha concretado el traspaso de todas las competencias. Estaba previsto que la entrega se realizara en un plazo no mayor a un año. Uno de los temas pendientes entre la Prefectura de Pichincha y el nuevo Gobierno provincial es la transferencia del centro médico. Allí trabajan 20 empleados entre doctores, enfermeras y personal administrativo. Los salarios aún son cancelados por la Prefectura de Pichincha.Juliana Quezada, secretaria contadora, teme que el cambio de administración la perjudique y se quede en el desempleo. El Patronato Provincial de Pichincha trató de que este dispensario sea administrado por la Municipalidad, pero el prefecto Geovanny Benítez se opuso.Hasta el momento, las autoridades no han dado una fecha para que se concrete el traspaso. Mientras el proceso sigue en definición, la atención en el centro médico es normal. Una situación diferente se vive en la terminal terrestre.Patricio Moncayo, administrador de la central, dijo que desde que la Prefectura de Santo Domingo de los Tsáchilas está al frente, esta institución ha mejorado. Se convirtió en empresa.En esta entidad trabajan 99 empleados. Tiene un presupuesto anual de USD 1,8 millones. La Prefectura tiene previsto invertir USD 187 000 en obras de mejoramiento de la estación.Luis Sánchez, usuario, cuenta que ve una mejor organización, principalmente en la frecuencia de las unidades.
Otro bien que pasó a la provincia tsáchila es la escuela Kasama. Allí estudian 600 alumnos. El 56% de ellos proviene de hogares de escasos recursos.La Prefectura de Pichincha, además, transfirió escuelas y terrenos en las parroquias rurales y un recinto ferial en la parroquia Valle Hermoso. También el área del campamento de la maquinaria de la entidad fue entregada a la nueva autoridad.