‘Los turistas extranjeros dejaron de venir porque los viajes en autoferro a la Nariz del Diablo están suspendidos”, cuenta preocupado Jorge Neama. Él es gerente del Hotel Gampala, ubicado en el centro Alausí (Chimborazo). Desde el pasado 4 de marzo, cuando se cerró este tramo -uno de los atractivos turísticos de la provincia- el movimiento económico bajó en un 70% en la zona. Durante la semana, en las habitaciones de su hotel recibía a 60 turistas de Francia, España, Inglaterra y Alemania. Ahora solo llegan 15. “Esperamos que en agosto los trabajos en la vía férrea culminen, caso contrario tendremos más pérdidas económicas”. Otro de los negocios afectados es el Hotel Europa. Según el recepcionista César Mora solo 10 de las 24 habitaciones están ocupadas. Antes se llenaba con turistas extranjeros. “No tenemos más atractivos turísticos. La Nariz del Diablo es un atractivo para los visitantes”. Eso preocupa a Hernán Costales, presidente de la Asociación de Hoteleros de Chimborazo. Por ello, espera que el plazo previsto por los directivos de los Ferrocarriles del Ecuador Empresa Pública (FEEP) se cumpla. “La temporada alta del turismo es julio, agosto y septiembre, pero perderemos dos meses. Aún no se hace un análisis de cómo nos afectará económicamente”. En Riobamba, hay 150 hoteles, residenciales, hosterías y otros negocios que dependen de los turistas que viajan en tren. Ellos pernoctan en esta ciudad para luego ir a Alausí, ubicado a 68 kilómetros. Pero los hoteles y residenciales más afectados están en Alausí.Freddy Cabrera, gerente de la Regional Sur de la FEEP en Chimborazo, explica que los plazos estimados para terminar la obra se cumplirán. Desde el pasado 4 de marzo se han transportado 25 000 durmientes que serán colocados en los 13,5 kilómetros de vía. “Ya se adjudicó la obra a una empresa constructora y se espera que en 10 días comiencen los trabajos en ese tramo. La idea es terminar a inicios de septiembre”, indica.