El muro de escolleras que protegerá la playa de Bajoalto estará listo dentro de un mes. Ayer, una retroexcavadora daba forma al muro con las enormes rocas que descargaba un grupo de volquetes del Municipio de El Guabo.
Esta comuna de pescadores artesanales, a 60 kilómetros de Machala, pertenece a este cantón del norte de El Oro.
La barrera evitará que los fuertes oleajes dañen las zonas turísticas de la comuna, ubicada en el norte de la provincia. La obra cuesta USD 198 300 y es cofinanciada entre el Plan Binacional y el Cabildo guabeño.
Desde septiembre pasado, la intensidad de los oleajes combinada con los aguajes amenazan las estructuras de los locales asentados a 50 metros de la playa. Los propietarios de 25 negocios, entre comedores, bares y de venta de ropa playera temían tener que replegarse fuera de la playa debido al constante embate de las olas.
Rosa Olmedo, administradora de la picantería La Playita, recordó que en septiembre pasado un fuerte oleaje tumbó el viejo puesto de vigilancia ubicado a menos de 20 metros del filo de la playa. “El agua cubrió toda la playa. No ingresó a los locales, porque afortunadamente tenemos los negocios levantados sobre pilares”.
El nuevo mirador, desde donde se vigila a los bañistas, se levantó hace un mes, pero esta vez detrás del muro de escolleras.
El muro de 300 metros se edifica perpendicular a la playa y es complementario a otro, de 1 400 metros de longitud, que construyó hace cinco años la desaparecida Corpecuador.
En la comuna, donde habitan 400 familias, se prevé que con la barrera retornen los turistas. “Los bañistas no vienen porque piensan que ya no tenemos playa. Al contrario, hemos ampliado y mejorado los servicios para atenderlos mejor”, dijo Fulton Jaén, presidente de la comuna.