En Ibarra, el local de la Casa del Monigote se confeccionan figuras pequeñas y medianas, ante las restricciones por la pandemia del covid-19. Fotos: José Luis Rosales/ EL COMERCIO
Las autorizaciones que tenían 12 mercados para la comercialización de monigotes fueron suspendidas en Santo Domingo, luego de la resolución del Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional del 21 de diciembre del 2020.
Una semana antes, el COE cantonal había decidido que esa actividad se hiciera solo en esos centros de abastos que tradicionalmente organizaban ferias para exhibir los años viejos.
Incluso, tres de esos sitios pasaron las inspecciones del Cuerpo de Bomberos. En los mercados 20 de Octubre, Jorge Mahuad y la Alborada estaban las estructuras que se iban a utilizar para montar las estanterías de la feria.
El comerciante Jorge Valarezo se quejaba porque -a su criterio- las autoridades no fueron claras con las decisiones. “Nunca nos dijeron que estaba suspendida la feria. Creía que sí contábamos con los permisos”.
Valarezo había invertido USD 200 producto de la venta de su de legumbres, para comprar materiales. Ahora cree que debe vender los 50 monigotes a domicilio, porque en el cantón no se podrá quemar en los espacios públicos.
El director de la Unidad de Gestión Territorial del Municipio, Olmedo Ludeña, dijo que se harán controles para evitar que se comercialice clandestinamente este producto.
En Riobamba se ofertan los ‘viejos’ en locales, porque las ferias fueron suspendidas
En Riobamba las ferias de monigotes y artículos de pirotecnia están prohibidas, sin embargo, hay familias que los comercializan en almacenes y garajes. En la vía a Guano y en el sector del Baipás, por ejemplo, se instalaron al menos tres comercios.
La familia Palacios es especialista en la elaboración de monigotes, con carrizos, periódicos y engrudo. Lo hacen con al menos cuatro meses de anticipación.
“Este año hicimos menos de la mitad de los años viejos que fabricábamos antes. La gente ahora busca muñecos pequeños, que puedan quemar en sus patios”, cuenta Juan José Palacios.
El Municipio de Riobamba suspendió el concurso que durante siete años consecutivos ha premiado al mejor año viejo de la ciudad. Además, se harán operativos para controlar que no haya quema de monigotes en sitios públicos.
Ibarra, sin monigotes ni bailes de fin de año
En Ibarra no se autorizó ningún espacio público para la comercialización de los monigotes y juegos pirotécnicos, como se hizo hasta el 2019. Por la pandemia del covid-19, el COE cantonal prohibió actividades la quema, festivales y bailes de fin de año.
Sin embargo, en la urbe hay locales que se dedican a la confección de las tradicionales figuras. Juan Mancheno, dueño de la Casa del Monigote, cuenta que esta vez por la emergencia sanitaria fabricó únicamente muñecos pequeños y medianos, pero solo bajo pedido.
En este local laboraban este lunes 28 de diciembre cuatro personas, quienes con pinceles y sopletes daban los acabados a estas figuras que son elaboradas con papel y cartón.
Hay imitaciones de personajes de series animadas, súper héroes y hasta uno que representa al coronavirus. Hay muñecos desde USD 5 hasta 70.
El artesano asegura que la demanda por estos artículos aumenta los tres últimos días del año y espera que esta vez no sea la excepción.