Los jornaleros perdieron el trabajo

Una  comunidad desolada. De lunes a viernes, los hombres de Tapiapamba salen a buscar trabajo en haciendas de los cantones vecinos. Ellos saben de agricultura. Foto: José Mafla / EL COMERCIO

Una comunidad desolada. De lunes a viernes, los hombres de Tapiapamba salen a buscar trabajo en haciendas de los cantones vecinos. Ellos saben de agricultura. Foto: José Mafla / EL COMERCIO

El proyecto Yachay, que se desarrolla en el cantón Urcuquí (Imbabura), se desarrolla entre dos escenarios para la población.

Por un lado, está la satisfacción que provoca la restauración de la hacienda San José, en donde funcionará el campus universitario. Este edificio patrimonial será el corazón de la Ciudad del Conocimiento o Yachay, que se prevé levantar en 4 620 hectáreas.

Por otro lado, está la desesperanza de los campesinos que perdieron sus trabajos con la expropiación de cuatro haciendas, donde laboraban como jornaleros.

Se estima que hay 2 000 habitantes en las comunidades de El Puente, San Antonio, Armas Tola, Las Mercedes y Tapiapamba, que se encuentran en el perímetro de Yachay. Así asegura Sonia Valles, promotora de Participación Ciudadana del Municipio local.

Según Nelson Félix, alcalde de Urcuquí, la gente del cantón está apoderada del proyecto. "La parte anímica y mental de los urcuquireños ha cambiado".

Pero campesinos como Duval Mina, de 67 años, habitante de la comunidad de Tapiapamba, afirma que ya lleva un año desempleado. "El cultivo de las haciendas expropiadas se paralizó. Ya no necesitan peones".

Mina recuerda que los funcionarios de Yachay les dijeron que habría trabajo para todos. "Pero a los mayores de 35 años y a las mujeres no nos escogen para nada".

En la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), a cargo del macroproyecto, se informó que es un proceso que irá acogiendo gente para los trabajos conforme avance el plan.

Entre tanto, Mina se dedica a producir carbón para mantener a su esposa y cinco hijos. "En un mes bueno se produce hasta 15 cargas de carbón. Cada una se vende en USD 25", comenta.

Doris Quilumba, presidenta de la comunidad de San Vicente, asegura que el problema del desempleo es general. "Hay trabajo, pero solo para técnicos. Hasta para ser ayudante de albañilería hay que tener conocimientos".

Según Valles, para la construcción de la Universidad Yachay se ofrecieron 600 plazas de trabajo.

Para ello, se receptaron carpetas, del 10 al 20 de mayo pasado, en las oficinas de la Senescyt, de Ibarra, y el campamento del Cuerpo de Ingenieros del Ejército y el Municipio local, en Urcuquí, asegura.

Curiosamente se solicitaba solamente personal calificado, como albañiles titulados (ver gráfico).

Con el fin de mejorar la mano de obra local, los responsables del proyecto Yachay suscribieron un convenio con el Servicio Ecuatoriano de Capacitación profesional (Secap). Se brinda formación en las áreas de construcción e infraestructura, gastronomía y turismo. Los cursos se dictan los fines de semana , en la ciudad de Urcuquí.

Duval Mina se formó como electricista. Pero debido a su edad lo rechazaron, manifiesta.

Según Quilumba, durante el levantamiento de información se solicitó que los cursos de capacitación se dictaran de lunes a viernes, en las propias comunidades. Pero el pedido no se tomó en cuenta.

"La mayoría de compañeros riega sus parcelas el fin de semana. Es por eso que no todos pueden asistir a la formación del Secap", indica Quilumba.

Quizá Tapiapamba es la más afectada de las cinco comunidades de Yachay. A diferencia del resto, este caserío está poblado por campesinos afrodescendientes, que no tienen terrenos agrícolas.

Es por eso que la mayoría vende su fuerza de trabajo en las haciendas, señala Marco Espinosa, presidente de Tapiapamba.

El campesino comenta que muchos de vecinos han emigrado a otras ciudades en busca de trabajo. Eso lo confirma Falconeri Suárez, profesor de la Escuela Rafael Alberto Rosales, de la comuna.

Recuerda que de 42 niños que se inscribieron al comenzar este año escolar, ahora hay 28.

El Alcalde confía en que luego habrá mayores oportunidades. El Instituto Nacional Autónomo de Investigaciones Agropecuarias, por ejemplo, instalará un centro de investigaciones que necesitará agricultores. Entre tanto, los campesinos de las comunidades como Tapiapamba ahora buscan trabajo fuera del cantón Urcuquí.

Efectos del proyecto

El proyecto Yachay, que incluirá la construcción de una universidad, laboratorios y centros de investigación, se construirá en un plazo de 25 años.

Urcuquí fue escogido, entre cientos de ciudades del país, por su ubicación estratégica y recursos naturales favorables.

El valor de los predios se encareció. Según el alcalde Nelson Félix, un terreno de 500 metros cuadrados, que costaba USD 2 000 se vende ahora en USD 20 000. También es difícil conseguir casas y terrenos.

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