Iván Cajamarca Déleg, de 50 años, falleció el domingo 10 de noviembre de 2024 a la espera de que se concluya un trámite legal que le aprobara la eutanasia.
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Un pedido que nunca llegó
Iván Cajamarca deseaba una muerte digna en el momento en que lo quisiera, antes de sufrir más a causa del cáncer que le quitó la vida.
Para que el proceso se aprobara, Iván debía cumplir con tres requisitos: una evaluación psicológica, un examen siquiátrico y una evaluación social.
Sin embargo, su estado de salud decayó y no pudo completar el trámite que le exigía el Comité Interdisciplinario para la Aplicación de la Eutanasia.
Su familia lo ayudaba a realizar los trámites y constató las trabas que tiene el proceso. Citas médicas que no se realizaban por vacaciones de los médicos o la falta de espacio en las agendas de los médicos.
Iván tenía un cáncer que empezó en el hueso sacro, pero hace un par de semanas se le detectó un tumor en la cabeza que le causó dolores muy fuertes. La metástasis llegó a su páncreas, sus dolores se incrementaron.
Debido a su diagnóstico, Iván decidió acogerse a la resolución de la Corte Constitucional y solicitar la muerte asistida. Lastimosamente, el avance de su enfermedad fue más rápido que el del trámite.
La voluntad que sí se cumplirá
Iván Cajamarca es velado el lunes 11 de noviembre en la casa de un hermano. Este martes 12 de noviembre, se llevará a cabo una misa y posteriormente se realizará la cremación, tal como era su voluntad.
Posteriormente, se sembrará un árbol en un parque del cerro Jalshi en su honor, lo que también era su deseo, donde se colocarán sus cenizas.