Los ingenios azucareros del país se preparan para producir cerca de 11 millones de sacos de 50 kilos del endulzante.Es una cifra récord para el sector, según la Federación Nacional de Azucareros del Ecuador (Fenazucar). El año pasado la producción fue de 10,2 millones de sacos de 50 kilos. El ingenio Monterrey, en Loja, tomó la delantera y desde el pasado 4 de mayo comenzó a cosechar sus cañaverales. La empresa calcula producir 420 000 sacos de 50 kilos durante los 10 meses que tomará cortar las cañas.A excepción de otras industrias, Monterrey registrará una disminución en la producción. El año pasado procesó 490 000 sacos. “En el 2009 molimos un poco más de lo presupuestado y por lo tanto este año tendremos menos caña disponible”, explicó Juan Francisco Hidalgo, responsable de las tareas en fábrica. El ingenio Valdez, ubicado en Milagro (Guayas), iniciará la zafra el 21 de junio, mientras que un día después lo hará San Carlos, de Marcelino Maridueña (Guayas), según se anunció de manera extraoficial a los cañicultores de esa zona y de Naranjito, en la misma provincia. El ingenio Ecudos (ex La Troncal), administrado por el Estado, aún no define el inicio de la cosecha. Lo hará la próxima semana, informaron en sus oficinas. La producción de azúcar está concentrada en tres empresas. El 89% lo manejan Valdez, San Carlos y Ecuados. Bajo esa proporción histórica, juntas proveerán al mercado interno cerca de 9,7 millones de sacos de azúcar. El 11% restante lo comparten Monterrey, Iancem (Ibarra, Imbabura) e Isabel María (Babahoyo, Los Ríos).Aunque hay las expectativas de una buena cosecha, a los cañicultores independientes les preocupa el precio que recibirán por su producto. “A nosotros nos pagan el 75% del valor del saco de azúcar que sale de los ingenios al mercado. Pero aún no sabemos si van a modificar el precio referencial”, indicó Carlos Altamirano, presidente de la Asociación de Cañicultores de Naranjito.Según los cálculos de Altamirano, por cada tonelada recibirán entre USD 22 y 23, pero teme que ese precio no sea rentable debido al incremento del costo de los insumos agrícolas que debieron afrontar el año pasado, en plena siembra. “Este año bajó un poco el precio de la urea y fósforo por los controles que hizo el Gobierno, pero los herbicidas, en cambio, se dispararon”, dijo el productor. Un tanque de 20 litros de Butrin, por ejemplo, pasó de USD 120 a 200 en un año, aseguró.