El paro de los transportistas urbanos y taxistas de Ibarra continúa sin solución. Hasta las 15:00 de ayer los dirigentes de la transportación mantenían una reunión con el alcalde Jorge Martínez. Sin embargo, ninguno de los dos sectores cedía.
Los choferes solicitan la nivelación de la tarifa de transporte urbano de pasajeros de USD 0,18, de servicio popular, a USD 0,25, de servicio ejecutivo.
Según Marco Ramírez, presidente de la cooperativa 28 de Septiembre, que junto a la empresa San Miguel de Ibarra están paralizadas, muchos propietarios de buses han modernizado sus unidades. Por ello, consideran que deben cobrar la tarifa ejecutiva aprobada por el Consejo Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (CNTTT), en el 2003. “Son siete años que hemos estado trabajando a pérdida”, dijo.
El ibarreño exige que se deponga la medida de hecho, para buscar una solución.
En los exteriores del Municipio, decenas de estudiantes universitarios se concentraron para rechazar el alza de pasajes. En la ciudad, la mayoría de ciudadanos se movilizan en camionetas, motos, autos particulares que hacen de taxis y hasta a pie.
Las clases en los planteles educativos también están suspendidas desde el jueves. Los taxistas, que se sumaron a las protestas de los autobuses, incluso, amenazaron con cerrar las vías.
Incluso el presidente Rafael Correa está preocupado por el paro de los transportistas de Ibarra, según dio a conocer el alcalde de Ibarra, Jorge Martínez.
El martes anterior los taxistas de Tulcán cerraron las carreteras de ingreso a la capital carchense. Ellos, al igual que los taxistas de Ibarra, se niegan a que se incrementen nuevas empresas de los denominados taxis ejecutivos.