Representantes de diferentes organizaciones públicas y de cooperación internacional participaron en el Foro Nacional Movilidad Humana.
La cita se efectuó en la ciudad de Ibarra, provincia de Imbabura, el jueves 25 de noviembre de 2021. Entre sus objetivos buscó resaltar la importancia de la integración entre habitantes de ciudades de acogida y personas que han salido de su país en búsqueda de nuevas oportunidades.
Para Carlos Espinosa, presidente de la Junta Provincial de Imbabura de la Cruz Roja, este fue un espacio para compartir experiencias y afianzar el trabajo coordinado entre las distintas organizaciones de cooperación que atienden temas de movilidad humana.
La capital imbabureña ha dejado de ser una ciudad de paso y en los últimos meses se ha convertido en una urbe de acogida. Según Dayana Arciniega, funcionaria del municipio local, bajo ese escenario se han implementado acciones como la de atención en albergues temporales y alimentación.
Ahora se planifica la construcción de un albergue especializado para familias que se encuentren en condición de movilidad. Se prevé brindar una atención para 180 personas.
Entre tanto, Pichincha, Guayas, Azuay e Imbabura están entre las provincias identificadas con mayor población migrante.
Según Sonia Cárdenas, coordinadora nacional del proyecto Johanniter de la Cruz Roja Ecuatoriana, en estas cuatro localidades se han asentado ciudadanos extranjeros, especialmente venezolanos, en busca de oportunidades de trabajo y educación para sus hijos.
Con este último indicador se estableció, por ejemplo, que hay un mayor porcentaje de niños de ese país inscritos en escuelas de estas localidades.
Por eso, la entidad desarrolla desde diciembre pasado un proyecto de Fortalecimiento de Integración Socioeconómica de migrantes venezolanos y pobladores locales. Este plan tiene tres componentes: salud mental, emprendimientos y acciones comunitarias en comunidades de acogida.
En Ibarra hasta el momento se han identificado a 130 familias que son beneficiarios de esta iniciativa. En diciembre inicia la capacitación a un primer grupo de 110 personas en panadería y repostería, peluquería y belleza, preparación de alimentos, costura y confección.