El hundimiento de un tramo de la vía El Carmen – Río de Oro, en la zona rural de Manabí, obstaculizó el paso de los ganaderos que transitan para vender sus productos. Foto: María Victoria Espinosa/ EL COMERCIO
Las fuertes lluvias de esta semana provocaron un hundimiento en el kilómetro 35 de la vía El Carmen – Río de Oro, en la zona rural de Manabí.
La mañana de este 9 de febrero de 2017, la maquinaria del Municipio de El Carmen y la Prefectura de Manabí habilitaron un tramo de la vía. Aunque, el paso es restringido y la carretera solo se abre cada dos horas, para peatones y vehículos livianos.
Dos máquinas trabajan en la recuperación de la carpeta asfáltica de la vía que fue construida hace dos años. Según la Prefectura de Manabí, el hundimiento se presentó porque el agua de las lluvias y el de la pendiente del río Oro se acumularon y socavaron las bases de la carretera.
El vicepresidente de la comuna Río de Oro, Jervis Loor, señaló que la calzada empezó a agrietarse desde el fin de semana. Pero el 7 de febrero se hundió luego de que un camión que transportaba ganado hacia El Carmen cruzara.
Loor señala que la vía es fundamental para los 3 000 ganaderos de la zona, que viven en 25 comunidades del sector Río de Oro. Ellos venden semanalmente 300 quintales de queso y 200 reses en El Carmen y Santo Domingo de los Tsáchilas.
“Estamos preocupados por el queso y la leche que se nos pueden perder si no la vendemos pronto. Podemos aguantar hasta el miércoles más o menos”.
Según el Municipio de El Carmen se trabaja para habilitar la vía y se espera que hasta este 9 de febrero de 2017 se reconstruyan las bases de la carretera para habilitarla, pero la rapidez de los trabajos dependerá de las lluvias en ese sector, aunque desde la madrugada hasta el mediodía de hoy no se han registrado precipitaciones.
El alcalde Hugo Cruz señaló que en verano se gestionará un estudio, que determinará los trabajos que deben hacerse en la carretera para que no vuelva a ceder.
Mientras , el paso continuará restringido, para avanzar con los trabajos. Sin embargo, hoy se retomaron las clases en las tres instituciones educativas del sector.
Según el Burgomaestre, ayer se suspendió la jornada educativa debido a las fuertes lluvias y a que las 25 comunidades, en las que viven 10 000 personas estaban incomunicadas. “Ayer era peligroso que los profesores y estudiantes transiten por el lugar. Pero hoy ya el paso se habilita cada dos horas y los profesores pueden cruzar a pie por la carretera”.
Según Cruz esta es la primera emergencia invernal fuerte que se presenta en el cantón.