En Riobamba, siete personajes tradicionales protagonizan los pases
del Niño. Foto: EL COMERCIO.
El pase del Niño es la principal expresión cultural y religiosa de Navidad en Riobamba y Cuenca. En la capital azuaya hoy (24 de diciembre del 2018) se cumplirá el pase del Niño Viajero con la participación de 60 000 devotos, en un recorrido de más de siete horas.
La eucaristía en honor del Viajero se iniciará a las 07:30 en la iglesia del Carmen de la Asunción; luego la imagen será trasladada hasta el templo de San Sebastián, donde será colocada en un altar. La Tercera División de Ejército Tarqui es la prioste en esta ocasión.
El pase empezará a las 10:00 con 10 carros alegóricos adornados por el Monasterio del Carmen de la Asunción. Allí, se recreará el nacimiento de Jesús y las costumbres y tradiciones indígenas del Ecuador.
En esos vehículos irán la reina de Cuenca, Cristina Ortega, y la soberana de los barrios, Tamara Castro. Ellas estarán vestidas como mayorales. Les seguirán los carros alegóricos de las entidades públicas, empresas privadas, parroquias, comunidades, barrios y familias.
Según el coordinador del pase, Telmo Tello, hasta el viernes pasado estaban inscritos más de 1 500 vehículos, entre grandes y pequeños, que estarán adornados con caramelos, frutas, bebidas, granos, cerdos y cuyes asados.
A las 15:00, la imagen del Niño Viajero bajará del altar en los exteriores de la iglesia de San Sebastián para que participe del cierre del desfile, que concluirá en la iglesia del Carmen de la Asunción, donde habrá otra eucaristía. Todas las actividades son organizadas por la Arquidiócesis, Monasterio del Carmen y el Municipio.
En Riobamba, la certificación patrimonial que recibieron los pases en noviembre pasado incentivó más la tradición, que es considerada un ícono religioso de la ciudad.
Entre el 1 de este mes y la primera semana de febrero se realizarán más de 1 000 corsos, que recorrerán las calles de la capital chimboracense.
Esta tradición representa la alegría y agradecimiento por el nacimiento de Jesús. Familias, asociaciones de devotos, parroquias católicas y casi todas las instituciones públicas organizan los pases.
El año pasado, el Municipio de Riobamba autorizó los recorridos para cerca de 500 pases del Niño; sin embargo, este año se estima que se duplicaron. “Es una tradición que no se pierde y que más bien se incrementa. Ahora queremos trabajar en recuperar la autenticidad de los personajes patrimoniales y evitar figuras extranjeras o de otras festividades nacionales que descontextualizan la fiesta”, dice el promotor de la declaratoria, Arcángel Valdiviezo.
El Cabildo de Riobamba también impulsa una campaña de preservación de los personajes tradicionales y la difusión en todo el país para atraer al turismo. Los danzantes, curiquingues, sacharunas, diablos de lata, payasos, perros y monos son los personajes originales de Riobamba.
El pase del Niño Rey de Reyes es el más esperado en esta ciudad. Cuenta con la mayor cantidad de participantes. Se calcula que cada año acuden más de 5 000 disfrazados. Como todos los años, la imagen desfilará en manos de sus priostes el domingo 6 de enero.
Otros pases que generan expectativa son del Niño Cubanito, que es reconocido por tener el nacimiento más grande de la ciudad y del Niño Chimborazo, famoso por la gran cantidad de grupos de danza folclórica que llegan de todo el Ecuador para participar en el desfile.
En otras ciudades como Ambato e Ibarra, también, se realizan pases del Niño, pero de menor magnitud. En la capital de Imbabura, los planteles educativos católicos organizaron estas procesiones.
Los establecimientos como el Oviedo y la Unidad Educativa Bilingüe efectuaron los desfiles religiosos en las calles de Ibarra, el viernes pasado. Allí, los estudiantes representaron varias escenas bíblicas.
Durante este mes se realizan estos pases por el centro de Ibarra. Los habitantes y turistas disfrutan de las representaciones. En Ambato, en cambio, estos recorridos se desarrollaron en los patios de los centros educativos porque una ordenanza prohíbe desde hace 12 años el uso de las calles.
En esta ciudad hay organizaciones que buscan mantener esta tradición como la comunidad Franciscana, que planificó para el próximo 1 de enero el pase con la participación de los niños que siguen el catecismo para primera comunión y confirmación. Al menos 600 menores de edad representarán el nacimiento de Jesús.