La planta de la empresa Asfaltar funciona desde finales del 2010 en el sector de Uzhupud, en el cantón azuayo de Paute. Foto: Xavier Caivinagua/EL COMERCIO.
El Gobierno Provincial de Azuay se consolida como el mayor proveedor de asfalto del Austro, a través de la empresa pública Asfaltar. En los dos últimos años tiene un crecimiento sostenido en la producción del material y la venta a entidades públicas y sector privado.
La planta asfáltica está ubicada en el sector de Uzhupud, en el cantón Paute, cerca del río del mismo nombre, a 30 minutos de Cuenca. En dos hectáreas están emplazadas las máquinas trituradoras de áridos, procesadora de asfalto y de tendido de material… Además, rodillos, retroexcavadoras, volquetes, cargadoras y tractores.
Allí, trabajan 52 personas dedicadas a la explotación y trituración de los áridos, producción y tendido del asfalto. En las inmediaciones de las oficinas administrativas están las grandes montañas de áridos de varias características y obreros manejando las máquinas.
La empresa Asfaltar se creó a finales del 2010 con una inversión de USD 5 millones. Con ese dinero se adquirió la maquinaria para explotación, producción y el terreno. Según el prefecto azuayo, Paúl Carrasco, la idea fue romper el oligopolio en la venta del material que lo mantenían dos empresas, abaratar costos, ampliar la atención en las carreteras y cambiar la matriz vial.
Hasta el 2010, la Prefectura intervenía en un promedio de 18 kilómetros de vías al año con doble tratamiento superficial bituminoso y, ahora, sobre los 55 kilómetros con asfalto.
El proyecto también se ideó para vender el producto a los gobiernos parroquiales y cantonales. Además, dice el gerente de Asfaltar, Teodoro Montesinos, la empresa privada está dentro de los compradores.
En el 2012 produjeron 16 259 metros cúbicos de asfalto y el año anterior 23 051. Adicionalmente, ofrecen áridos, materiales de mejoramiento y servicios de señalización.
La planta tiene una capacidad de producción de 100 toneladas por hora. En la actualidad manejan una cartera de más de 50 clientes, entre públicos y privados de Azuay y Cañar. Entre ellos figuran casi todos los municipios de Azuay y algunos de Cañar, gobiernos parroquiales, universidades, empresas constructoras…
El hormigón asfáltico lo venden en la planta y ofrecen el servicio de tendido en la obra y es lo que más demanda tiene.
El año anterior, por ejemplo, la compañía Construcprogres adquirió 5 981 metros cúbicos de asfalto para el mantenimiento de las carreteras intercantonales Ramada-Nabón, Chordeleg-Principal y Girón-San Fernando.
La Universidad de Cuenca asfaltó algunas calles internas y el estacionamiento de vehículos con Asfaltar. Hace un año, Nabón también asfaltó las calles céntricas de la ciudad con este proveedor.
Según su alcaldesa, Magaly Quezada, el producto es bueno y más económico, con relación a otras empresas.
La constructora privada Caminos es uno de los nuevos clientes. Según su gerente, Galo Rodas, durante este mes comprarán 5 000 metros cúbicos de asfalto para usarlo en cinco carreteras de Gualaceo y Paute. “Compramos por la cercanía con las obras y porque el material cumplió con las pruebas de laboratorio”.
Hace un mes, el Municipio de Cuenca firmó un convenio con la Prefectura de Azuay para el recapeo de 15 kilómetros de calles de 10 barrios de la ciudad, con una inversión de USD 1,5 millones. Al momento la maquinaria trabaja en Monay.
Para fortalecer el crecimiento, se proyecta desarrollar alianzas estratégicas con los gobiernos parroquiales y municipales. En esa línea, Montesinos dice que han tenido acercamientos con los municipios de Cuenca, Paute y Santa Isabel. Uno de los ejes será el intercambio de material pétreo por asfalto.
Asimismo, están por trasladar la planta de asfalto al sector de La Virginia, muy cerca de Uzhupud, donde se ubica una mina de propiedad de la Prefectura. Se pretende extraer dos millones de metros cúbicos de áridos y de esta forma ampliar la producción.