El papel de los cabildos indígenas y la delimitación de los territorios ancestrales. Esos fueron los temas que más inquietaron a 90 dirigentes de las comunidades kichwas de Otavalo, Cotacachi e Ibarra (Imbabura) que asistieron ayer a un curso sobre legislación.
Según Rocío Cachimuel, presidenta de la Federación de Indígenas y Campesinos de Imbabura (FICI), que congrega a 160 comunas, la capacitación es parte de un programa de fortalecimiento de los gobiernos comunitarios que impulsa la organización.
La formación, que duró cuatro días, estuvo a cargo del abogado Carlos Poveda, experto en temas de justicia indígena; el antropólogo Fernando García, docente de la Flacso; y Benjamín Inuca y Manuel Díaz, especialistas en procesos de organización.
Ahí se explicó que los presidentes de los cabildos son la máxima autoridad de los territorios indígenas. Incluso, sobre las tenencias políticas y las juntas parroquiales.
José Picuasi, presidente de la comunidad de Carabuela, comenta que esa potestad está amparada por la Constitución del país.
Para el gobernador de Imbabura, Wilmer Taboada, son diferentes instancias que deben coordinar acciones.
Respecto a los territorios hay problemas en los catastros rurales, dice Cachimuel, porque los técnicos levantaron la información sin coordinar con los dirigentes de las comunas. Ahora buscan solucionar esos problemas.